Nueve horas desde Pinamar, ocho desde Mar del Plata y tal vez un poco más: así como aumenta el número de personas que deciden escaparse en los fines de semana largos, también se duplican los tiempos de viaje. Expertos en tránsito aseguran que para los porteños la vuelta a casa después del feriado de Semana Santa –que en movimiento turístico se asemeja al ocurrido durante el Carnaval– puede llevar hasta diez horas desde la costa atlántica.
“Salimos a las 8 de la mañana de Lanús hacia Mar del Plata. A las 11, habíamos hecho sólo 50 kilómetros. En total tardamos diez horas”. El de Celeste Lattanzio es un relato que se repite: el éxodo que se inició entre el miércoles por la tarde y el jueves por la mañana hacia la costa multiplicó las cinco horas de viaje promedio. Para el retorno se esperan los mismos retrasos.
“Normalmente hay mil autos por hora en las rutas, en momentos como éste hay más de 2.500”, explica Fabián Pons, presidente del Observatorio Vial Latinoamericano (Ovilam). Llegar a la costa para el fin de semana largo requirió atravesar rutas con colas de 10 kilómetros el jueves, demoras de media hora en los peajes y las intersecciones con poblaciones que se hacen a paso
de hombre.
“Esta Semana Santa es un éxito: el Partido de la Costa tiene entre 70 y 80% de ocupación, 15% más que el año pasado”, asegura Ignacio Crotto, subsecretario de Turismo de la Provincia. “Cuando hay tantos autos, la velocidad promedio es de 60 km/h, en lugar de los 100 habituales”, explica Ernesto Arriaga, vocero de Vialidad Nacional. “Si hay más autos que ruta, siempre vas a tardar”, sostiene, recordando que el parque automotor aumentó a 15 millones de autos este año y, por ende, los caminos se colapsan durante los picos turísticos.
Ser previsor es el mejor consejo. Natalia Sánchez salió a las dos de la mañana del jueves hacia Mar Azul y planea volver también en la madrugada del lunes. “No me gustan los embotellamientos: soy precavida”.
“Lo más importante es evitar la hora pico”, coincide Arriaga, que recomienda no salir entre las 16 y las 22 de mañana. No se trata sólo de una cuestión de comodidad. El 84% de los accidentes ocurren cuando no se respetan las velocidades máximas. Circular por las banquinas, usar el celular y no tener las ocho horas de descanso también genera situaciones de riesgo, aclara.
Harán 2.800 km de autovías
El 40% de las rutas del país están en mal estado y, hoy, 930 obras que se iniciaron en los últimos años están paralizadas o semiparalizadas. El dato se desprende de un informe del Ministerio de Transporte Nacional. En ese contexto, el macrismo anunció un plan de obras para los próximos cuatro años que contempla la construcción de 2.800 km de autovías, y otros 4 mil de rutas, con un presupuesto para este año de $ 32.500 millones. “Queremos facilitar la producción y lograr que viajar por nuestras rutas sea seguro”, dice a PERFIL el ministro de Transporte, Guillermo Dietrich.
Entre las obras anunciadas hay trabajos sobre la Autovía 40, en un tramo entre Mendoza y San Juan; la RN 34, que atraviesa Jujuy; y otro tramo de la RN 9, corredor que conecta la Ciudad de Buenos Aires con varias provincias, tanto a la altura de Córdoba como de Jujuy.
Entre las obras que se reanudaron están las Autovías RN 8 entre Pilar y Pergamino, donde el presidente Macri hizo uno de los primeros anuncios de su gestión; y la RN 7 entre Luján y Junín; entre otras.