La Presidenta presentó este mediodía el programa "Conectar Igualdad.com.ar", cuyo objetivo principal es adquirir casi 3 millones de computadoras en los próximos 3 años, permitiendo que todos los estudiantes secundarios de la Argentina tengan su propia computadora. El modelo utilizado es el 1:1, ya que será una computadora por alumno y será financiado con fondos del ANSES.
Las primeras netbooks que entregó el gobierno en el Teatro Cervantes, surgen de un plan anterior (licitado en el mes de diciembre y presentado en febrero de este año), como parte de un programa de 250 mil computadoras para los estudiantes de los últimos años de las escuelas técnicas. Se trata de un equipo desarrollado por Intel y conocido como Classmate, y la licitación fue adjudicada a la empresa EXO - Telefónica. Posee una pantalla de 10 pulgadas, procesador Intel Atom de 1.6 ghz y 1 GB de memoria RAM. El disco rígido es de 160 GB, y posee conectividad Wi-Fi y 3G (en el caso de que el alumno coloque una SIM Card similar a la que cuentan todos los celulares). El diseño original tuvo que ser modificado, ya que estaba pensado para un público de menor edad. Se dejó de lado al "formato valija" que caracterizó desde siempre a las Classmate, por uno más apropiado para los alumnos de los últimos años de la secundaria.
A nivel software, cuentan con dos sistemas operativos: Windows XP y Linux (la distribución es RXArt y es desarrollada por una empresa local). Por pedido del Ministerio de Educación de la Nación, la netbook incluye el paquete ofimático Office (en Windows) y OpenOffice (en Linux). También cuenta con herramientas de control parental (para que los menores no ingresen a sitios inapropiados), herramientas de comunicación interna entre los alumnos y los docentes (ideal para realizar trabajos grupales) y software para álgebra, física, química, etc.
El plan estatal planea incorporar pendrives, routers wi-fi y toda la infraestructura de conectividad en las escuelas, para que los alumnos puedan navegar y comunicarse por Internet. Un detalle interesante del proyecto, es la incorporación de un chip puede anular todo el equipo en caso de denuncia de robo o extravío. Este chip necesita una validación por parte del instituto educativo. La garantía de los mismos será de 3 años y la reparación se realizará con técnicos en las mismas escuelas.
Si bien el proyecto especifica que las computadoras podrán ser llevadas a los hogares de los estudiantes, ningún representante de Intel o funcionario del Ministerio de Educación respondió sobre qué sucederá cuando el estudiante finalice sus estudios.