Pandemia

Cómo se cerró el acuerdo en Moscú para traer la vacuna Sputnik V

Carla Vizzotti y Cecilia Nicolini fueron las funcionarias elegidas por Alberto Fernández para negociar con el gobierno de Vladimir Putin en la capital rusa.

Vizzotti y Nicolini en Moscú, las enviadas de Alberto Fernández a cerrar el trato con Rusia por la vacuna Sputnik V. Foto: María Eugenia Cerruti

“Listoooo”, fue el mensaje de WhatsApp que mandaron minutos antes de despegar de Rusia junto a una foto en la que, a pesar del barbijo, logran transmitir las sonrisas. Carla Vizzotti y Cecilia Nicolini fueron las funcionarias elegidas por Alberto Fernández para concretar las negociaciones con Rusia, verificar el proceso de producción de la vacuna Sputnik V y agilizar el proceso de aprobación. “Esta es la responsabilidad más grande de nuestras vidas”, coinciden ambas funcionarias ante PERFIL al regresar a la Argentina en el vuelo que trajo las primeras 300 mil dosis.

Llamados, chats y videoconferencias. Durante los días en Rusia, las funcionarias mantuvieron una comunicación constante con el Presidente sin importar la diferencia horaria entre Buenos Aires y Moscú. Las funcionarias admiten que las últimas dos semanas durmieron poco: además de tener los días completos con distintas reuniones, podían encontrarse informando las novedades en las negociaciones y avances clínicos al jefe de Estado mientras el reloj en Rusia marcaba las 4 am y en Argentina las 22 horas.

El día más agitado que les tocó vivir fue cuando el Presidente ruso, Vladimir Putin, informó que aún no se había dado la vacuna y que esperaría a que esté aprobada su aplicación a mayores de 60 años. Horas antes de estas declaraciones. que en nuestro país retumbaron a las 9 am, las funcionarias habían mantenido una reunión con el comité de expertos rusos que es el que debía recomendar al Gobierno su uso en esta franja etaria. Allí les habían adelantado que esa recomendación ya había sido elevada al Ministerio de Salud de este país. Su aprobación era cuestión de días y por eso Nicolini explica que “estaban tranquilas”, pero sabían que en Argentina las declaraciones de Putin generarían un fuerte impacto. Por ello, tomaron sus celulares y llamaron a Fernández para que en Buenos Aires pudieran aclarar de manera inmediata la información.  

“No fuimos nosotras, fue un logro colectivo. Nosotras tuvimos la inmensa responsabilidad y el honor de ser las caras más visibles”, dice la secretaria de Acceso a la Salud a este medio. Vizzotti y Nicolini se conocieron pocos días después de que Fernández asuma la presidencia, pero comenzaron a trabajar juntas en marzo, cuando la pandemia de coronavirus llegó a la Argentina. Desde entonces, se mueven en tándem.

Fuertes críticas en Rusia por venderle vacunas a la Argentina

Viajaron dos veces a Rusia. El primer viaje fue en octubre bajo un total hermetismo y en medio de las negociaciones con el gobierno de Putin para conseguir millones de dosis que solo Rusia podía garantizar. El segundo, ya con el contrato firmado, fue el 12 de diciembre. Aunque la estadía se iba a extender por solo una semana, finalmente regresaron el 24 en el mismo vuelo que trajo las primeras dosis.

Nicolini admite que sus perfiles son “muy distintos y esto hace que nos complementemos y podamos trabajar muy bien juntas. Es una relación muy consolidada”. Vizzotti aportó la mirada epidemiológica y la asesora presidencial se encargó de cuidar y avanzar en el vínculo político con el país proveedor de la vacuna contra el coronavirus.

“En un desafío tan grande,  con tanta tensión, es clave un lindo vínculo y el nuestro es hermoso. Para nosotras fue un antes y un después en nuestra relación este logro. Ser dos mujeres y cuatro inspectoras, también es muy fuerte desde la mirada de género y eso nos da mucho orgullo”, relata la secretaria de Acceso a la Salud.

Vizzotti siempre se definió como una “técnica”. Llegó al Ministerio de Salud en 2007, de la mano de Ginés González García. Permaneció al frente de la dirección de Enfermedades Inmunoprevenibles hasta 2016, cuando fue desvinculada de su cargo.
Durante los años siguientes del gobierno de Mauricio Macri, lejos de la función pública, trabajó en la Fundación Huésped y fue presidenta de la Sociedad Argentina de Vacunología y Epidemiología (SAVE).

El gobierno ruso autorizó la vacuna Sputnik V para mayores de 60 años

Con el regreso de González García, la funcionaria también volvió al ministerio. La pandemia la puso en el centro de la escena, se convirtió en una de las voces más autorizadas del Gobierno para enfrentar al coronavirus y su rol es mucho más que técnico.
Nicolini conoció al Presidente en la gira por Europa que llevó a cabo en 2019 cuando aún era candidato. Llegó a Fernández como coordinadora del Grupo Puebla. En aquel entonces vivía en Boston y el postulante del Frente de Todos ya le había ofrecido un lugar en el Gobierno, lo que llevó a la actual asesora presidencial a regresar a la Argentina, después de 15 años. Su único paso por la función pública había sido en el Ministerio de Turismo bajo la presidencia de Néstor Kirchner. Ahora es una de las personas en la que el Presidente más confía.

Este sábado 26 de diciembre, Fernández las recibió en la Quinta de Olivos. Se tomaron unos minutos para la celebración de la llegada de las primeras dosis, pero inmediatamente comenzaron a coordinar el arribo de los cinco millones de dosis de vacunas planificadas para enero.

“Este es un logro para el país. Tenemos que sentir mucho orgullo y redoblar los esfuerzos para tener una gran campaña de vacunación”, dice Vizzotti. Más allá de su rol y el de Nicolini, aclara que detrás estuvo el “trabajo inmenso de tantos trabajadores y trabajadoras, Ministerio de Salud, Anmat, Aerolíneas Argentinas, Aduana, las provincias que trabajaron contrarreloj para lograr este desafío que es el inicio de otro mucho más grande que recién empieza como el de la vacunación. Con un compromiso y apoyo político del Presidente y el ministro, que fue fundamental”.