Cada 6 de noviembre se celebra en Argentina el Día de los Parques Nacionales. Fue un 6 de noviembre, pero de 1903, cuando el perito Francisco Pascasio Moreno donó al estado tres leguas (7500 hectáreas) de las tierras patagónicas con las que le habían pagado sus trabajos en la frontera con Chile. Estaban cerca de Puerto Blest y la Laguna Frías, al oeste del lago Nahuel Huapi.
El naturalista quería que allí se hiciera un “parque público natural. El lugar se bautizó Parque Nacional del Sur y así de sencillo fue el despertar de un tesoro inconmensurable: nuestros parques nacionales. En 1934, el “Parque Nacional del Sur”, se convertiría en el Parque Parque Nacional Nahuel Huapi (717.261 hectáreas) de las provincias de Neuquén y Río Negro, la cereza del postre de San Carlos de Bariloche y Villa La Angostura.
Los Parques Nacionales son “áreas protegidas que cumplen funciones de relevancia en la conservación de recursos naturales y culturales. Sectores del territorio continental o marino de gran valor en cuanto a su biodiversidad y belleza escénica donde están limitadas las actividades humanas, contando con un estatus de protección legal”, reza el portal oficial del organismo que vela por ellos.
Argentina fue pionera en América del Sur y uno de los primeros países del mundo en crear Parques Nacionales. En materia de velocidad y preservación, Estados Unidos se anticipó a todos con la creación del Parque Nacional Yellowstone, en 1872.
En Argentina hay 48 áreas protegidas: 46 sobre territorio continental y 2 en zonas marinas. Todas ellas se agrupan en regiones cuidadas por la Administración de Parques Nacionales.
Parques Nacionales y Reservas del Noroeste
Parque Nacional Baritú (Salta), Reserva Nacional El Nogalar de Los Toldos (Santa Victoria Salta), Monumento Natural Laguna de los Pozuelos (Jujuy) Parque Nacional Calilegua (Jujuy), Reserva Nacional Pizarro (Anta, Salta), Parque Nacional El Rey (Salta), Parque Nacional Los Cardones (Cachi, Salta), Parque Nacional Aconquija (Tucumán), Parque Nacional Copo (Pampa de los Guanacos, Santiago del Estero), Reserva Natural Formosa (Formosa).
Pensar en el verano y en el rumbo norte no deberían intimidar para visitar algunos de los más bellos parques norteños, Por caso, el Parque Nacional Aconquija que se recuesta en la ladera oriental de estas cimas tucumanas donde el estío se vive en forma pareja todo el año, con módicos 28ª C y campera para cuando cae el sol. En este eterno cuadro subtropical serrano, lo único que podría impedir llegar son las lluvias del verano, que pueden entorpecer algunos tramos del recorrido. Entre el paraíso de las yungas y los campos alisos viven 400 especies de vertebrados, como el loro alisero, (Amazona tucumana), una especie endémica que nidifica entre noviembre y marzo.
Parques Nacionales del Noreste
Parque Nacional Chaco (Chaco), Reserva Natural Educativa Colonia Benítez (Chaco), Parque Nacional El Impenetrable (Chaco), Parque Nacional Iguazú (Puerto Iguazú, Misiones), Parque Nacional Iberá (Corrientes), Parque Nacional Mburucuyá (Mburucuyá, Corrientes), Parque Nacional Río Pilcomayo (Formosa), Reserva Natural Estricta San Antonio (Misiones).
Entre tantas maravillas, el Parque Nacional Iguazú, al norte de la provincia de Misiones, en el límite con Brasil, se encuentran las imponentes Cataratas del Iguazú, una de las Siete Maravillas Naturales del Mundo.
Este manto verde, que fue declarado Patrimonio Mundial por la UNESCO en 1984, muestra en todo su esplendor a la selva paranaense. Allí conviven entre el calor y la bruma, los palmitos, el palo rosa y el murmullo de los cañaverales.
El mono caí, el coatí, las ardillas grises, los tucanes, el preciado yacaré e incluso las tortugas de agua son las estrellas esquivas que más buscan los turistas.
A veces con más suerte, a veces con poca, pero están. Nadie se van sin su premio mayor: la estrepitosa caída del río Iguazú en cascadas sinfónicas desde 80 metros de altura. La tarifa general es $2000, pero los argentinos pagan $530 y los chicos entre 6 y 16, $530.
El Parque Nacional Iberá ( 195.094 ha) no hace sino referencia a los cuatro “islotes” correntinos de pastizales, palmares de caranday y montes de maderas tan nobles como el urunday, viraró, timbó y laurel negro, entre otras.
Yacarés, carpinchos, osos hormigueros, el ciervo de los pantanos, el yaguareté, el ocelote, el venado de las pampas y tantas otras especies que alguna vez creímos en vías de extinción encontraron en estos humedales correntinos de ríos, esteros y lagunas un hábitat propicio para renacer.
Como los anteriores, también al Parque Nacional Mburucuyá se accede por la Ruta Nacional 12, pero luego hay que seguir por la RN 118 hasta Saladas, RP 13 hasta Mburucuyá, RP 6 y RP 86 hasta el Centro de Visitantes de la Estancia Santa Teresa (175 km en total), y desde ahí partir.
La recompensa es la entrada gratuita a un mosaico ambiental, ya que aun estando dentro de los esteros del Iberá el Mburucuyá “se contamina” de las regiones chaqueña, paranaense y del espinal. A pesar del calor, entre febrero y julio es la época ideal para acercarse a contemplar los montes de palmeras yatay, los bosques de lapacho y los quebrachos colorados. Se cansará de ver zorros de monte, corzuelas, yacarés y aguará popé. ¿Algo autóctono? El pez Lepidosiren paradoxa, que tiene respiración aérea y sobrevive aún si baja el nivel del agua.
Parques Nacionales del Centro
Parque Nacional El Leoncito (Calingasta, San Juan), Parque Nacional Traslasierra (Córdoba), Parque Nacional Quebrada del Condorito (Córdoba), Parque Nacional San Guillermo (San Juan), Parque Nacional Sierra de las Quijadas (San Luis), Parque Nacional Talampaya (La Rioja).
Entre todos ellos, al Parque Nacional de las Quijadas puede accederse desde varias provincias (la ciudad de San Luis es el punto más próximo) vecinas que conducirán a la RN 147 hasta el paraje Hualtarán. Tras recorrer 120 km, sobre el Km 922 se encuentra la entrada al parque. Los ciudadanos argentinos pagan $210 la entrada y los chicos, la mitad. Si le gustan los cóndores, las águilas moras y las jarillas, este es su lugar. Pero hace calor (algunos recomiendan visitarlo entre abril y octubre).
Parques Nacionales del Centro Este
Parque Nacional Campos del Tuyú (General Lavalle, Buenos Aires), Parque Nacional El Palmar (Entre Ríos), Parque Nacional Islas de Santa Fe (Santa Fe), Parque Nacional Pre-Delta (Diamante, Entre Ríos), Parque Nacional Ciervo de los Pantanos (Buenos Aires).
Parques Nacionales patagónicos
Parque Nacional Lago Puelo (Chubut), Parque Nacional Laguna Blanca (Neuquén), Parque Nacional Lanín (Neuquén), Parque Nacional Lihué Calel (La Pampa), Parque Nacional Los Arrayanes (Neuquén), Parque Nacional Los Alerces (Chubut), Parque Nacional Nahuel Huapi (Neuquén y Río Negro), Parque Interjurisdiccional Marino Costero Patagonia Austral (Chubut).
Será muy difícil decidir a cuál no ir, porque la sombra fresca del Parque Nacional Arrayanes, aún en verano, llama desde la península de Quetrihu, al norte del Parque Nacional Nahuel Huapi, con bosques de bosques de coihues y ñires y desde luego arrayanes color canela de 15 metros de altura y 650 años de antigüedad. Entrada para los argentinos $ 230; chicos de 6 a 16 la mitad.
Accesible desde San Martín de los Andes, Junín y Aluminé, del Parque Nacional Lanín regresará con algunas de las mejores postales de este viaje: los 3.776 metros de altura del volcán Lanín, 24 lagos, bosque patagónico y también selva valdiviana con lengas, coihues, robles y araucarias. Camine siempre con cámara en mano: los soberbios cóndores andinos le harán una fiesta en cualquier parte desplegando sus inmensas alas de tres metros de diámetro. Entrada para los argentinos $ 230; chicos de 6 a 16 la mitad.
El calor del verano, es cierto, nos inclina hacia la patagonia y ahí está también el “nuevito” Parque Nacional Lago Puelo, que nació apenas en 1971 cuando se separó del Parque Nacional Los Alerces como área protegida independiente.
En torno al lago turquesa se desarrolló la mítica Comarca Andina del Paralelo 42°, cerca de El Bolsón, testigo y protagonista de una nueva ola de argentinos que se refugió en el sur como el horizonte del regreso a la naturaleza. La comarca del Lago Puelo recreó una nueva humanidad con artistas, artesanos, hippies y emprendedores de una Argentina bastante menos contracturada.
Parques Nacionales Australes
Parque Nacional Bosques Petrificados de Jaramillo (Jaramillo, Santa Cruz), Reserva Natural Silvestre Isla de los Estados (Tierra del Fuego), Parque Interjurisdiccional Marino Isla Pingüino (Santa Cruz), Parque Nacional Los Glaciares (Santa Cruz), Parque Nacional Monte León (Santa Cruz), Parque Interjurisdiccional Marino Makenke (Santa Cruz), Parque Nacional Patagonia (Santa Cruz), Parque Nacional Perito Moreno (Santa Cruz), Parque Nacional Tierra del Fuego (Tierra del Fuego).
En Santa Cruz, el mundialmente conocido Parque Nacional Los Glaciares podría inspirar una película de Disney con puentes, diques, cavernas y fantasmas azules que avanzan y retroceden según sus propios compases.
Por su interés glaciológico y la fauna rica con varias especies en peligro de extinción, en 1981fue declarado por UNESCO Patrimonio de la Humanidad.
Entre tantos témpanos, el glaciar Perito Moreno es el más reconocido a nivel mundial porque se puede acceder a él fácilmente y, además, nunca defrauda ni deja a sus visitantes sin el espectáculo del desprendimiento de alguna mole cayendo al agua.
La primavera y el verano es la mejor época para ir, y requiere buenas zapatillas y abrigo para días largos y caminatas interminables por lagos, lagunas, ríos de deshielo, el cerro Chaltén, el Fitz Roy y el Torre.
Como en otros parques, el precio de la entrada para argentinos es de $530, pero hay una promoción de 2 días consecutivos al precio de uno, si se compran los tickets on line.
Más austral aún, el Parque Nacional Tierra del Fuego abraza no sólo el territorio fueguino sino también la Antártida e Islas del Atlántico Sur, un verde azul profundo de 68.909 ha cubiertas de bosques patagónicos.
Desde el lomo cansado de los Andes hasta la costa marina, allí están las lengas rojas en otoño e intensas en verano, el canelo, el guindo, los coihues, los ñires, los cohiues eternos y nuestro único fiordo argentino sobre el disputado Canal Beagle: la Bahía Lapataia. La entrada para los argentinos, $ 230.
Y en el confín del mundo dos Parques Nacionales Marinos Namuncurá – Banco Burdwood I (Zona Económica Exclusiva Argentina), y Yaganes y Banco Burdwood II.
Nos llevará toda la vida conocerlos, pero podemos arrancar esta primavera y verano con una decisión difícil: cuál dejar para las próximas vacaciones.
