Este sábado 1° de octubre se celebra en todo el mundo el Día Internacional del Café. La iniciativa surgió entre los miembros de la cadena de producción cafetera, desde el cultivo hasta la industrialización, en el año 2014 y con el propósito de visibilizar su situación que, curiosamente, es difícil.
Aunque el café es la segunda bebida más consumida del mundo, detrás del agua, las personas que integran la cadena cafetera no la están pasando bien, sobre todo por un efecto postpandemia.
Con el cierre de restaurantes, bares y cafés, sin contar que el teletrabajo mermó la frecuentación de sitios gastronómicos, el consumo de café en espacios públicos cayó notablemente.
Aunque el precio del café se fue por las nubes –sobre todo en Argentina-, un productor sigue ganando lo mismo, un monto ridículo cuando tiene que contratar cosechadores de temporada, volver a preparar la tierra, invertir en fertilizantes, equipamiento, almacenamiento y distribución.
Muchos cafetales, que tradicionalmente eran una empresa familiar, se están quedando sin mano de obra: los jóvenes emigran en busca de un futuro mejor. Muchos puestos de trabajo están vacantes, pero no hay mano de obra y el sector está en declive, a pesar de que el consumo repuntó a medida que se levantaron las restricciones de circulación que dejó el Covid-19.
Día Internacional del Café, 1 de octubre
Sin embargo, si se lo mira desde los números, producir café parece un negoción:
- La Organización Internacional del Café (OIC), con sede en Londres, estima que el consumo de la infusión crecerá 3,3% en este año. Si es así, se habrán vendido 170,3 millones de sacos de 60 kg, mientras que en el período 2020/21 fue de 164,9 millones.
- Casi la mitad de la población mundial toma un café por día: en el mundo se consumen alrededor de 3 mil millones de tazas de café cada 24 horas.
- 50 países del mundo producen 7.7 millones de toneladas de café en una superficie de 10.5 millones de hectáreas. El 85% del café del mundo se produce en Latinoamérica
- Brasil ocupa el primer puesto mundial de producción: 2,2 millones de toneladas cultivadas en 2,3 millones de hectáreas. De ellas saldrá una cosecha equivalente al 30,16% del volumen mundial.
- Los siguientes puestos del ranking se los reparten Vietnam, Indonesia y Colombia. Cada uno de estos países produce entre 0.6 y 1 millón de toneladas en una superficie combinada de 2.6 millones de hectáreas.
- El mayor exportador de café es Sudamérica: los países de la región vendieron, en total, 42,24 millones de sacos entre octubre de 2021 y julio de 2022. El segundo puesto lo ocupan los países productores de Asia y Oceanía, que vendieron 37,6 millones de sacos, en los diez primeros meses del año cafetero 2021/22, según datos recientes de la Organización Internacional del Café.
- Muy lejos se ubican México y América Central, que disminuyeron 16,2% su volumen de ventas, que hoy son “solamente” de 1,54 millones de sacos.
- Es el segundo producto más comercializado del mundo junto con la Coca Cola.
- El 54% de los estadounidenses consumen café todos los días. Lo que convierte a los Estados Unidos en el país donde se toma más café.
- En promedio, cada argentino toma 208 tazas de café por año.
- La ingesta de café acelera el metabolismo entre 3% y 11%.
Aunque Brasil sea el mayor productor mundial, el vocablo café sigue siendo de origen árabe "Qahhwat Al-bun" significa "vino del grano". El grano del café es la semilla de la fruta del árbol de cafeto, un árbol que puede llegar a medir hasta 6 metros de altura.
Y el consumo hace furor en Asia. En Corea y Japón hay cafés temáticos sobre animés y doramas populares, en donde el café es la bebida que reúne. También hay cafés de gatos en los que se puede disfrutar un buen café acariciando felinos.
Japón dio un paso más todavía, al construir un spa a base de café, con piletones en donde darse literalmente un chapuzón de cafeína. Por ejemplo, el Yunessun Spa Resort.
Otra curiosidad la aporta Francia. Como una escuela de buenos modales, hay una cafetería en la que el café sale más caro si los clientes demuestran falta de amabilidad (saludar al entrar, al irse, dirigirse respetuosamente al mozo, etc.
Café "saladito" en Argentina
En Argentina, varias cadenas y locales de cafeterías anunciaron que el 1 de octubre regirá el 2x1 para sumarse al Día Internacional del Café y promover el consumo. No es poco, si se recuerda que un café cuesta no menos de $ 400 (cortado o lágrima) en un bar porteño, pero con variantes trepa hasta superar los $ 600 (café del día, capuccino, latte, doble, mocha, café con leche, etc).
Si la solución es prepararlo en casa, los bolsillos también se vacían: 1 kg de café molido para filtro o cafetera doméstica no baja de $ 3.500 (la marca más económica).
Algunos locales también se adhieren con promociones especiales: si se compra un vaso reutilizable o se lleva el propio, el café del día es gratis. Una excelente práctica, sobre todo por su marco de sustentabilidad con el planeta.
Cómo preparar un buen café
Según Claudia Salas Martínez, socia directora de la cadena de cafeterías que lleva el nombre familiar desde 1933, “uno de los grandes secretos de un buen café es que la cafeína se extrae a mayor contacto agua-café”. Y sostiene que a través de la prensa francesa o el drip, se logra un café suave, pero de “notas marcadas” para tener la energía que se necesita para comenzar el día.
¿Cómo preparar un buen café?
- El agua que se utiliza para preparar la infusión no debe hervir, porque quemaría el café;
- si se prepara con filtro, se recomienda un café molido medio, que requiere solo dos minutos de infusión;
- si el café se molerá con prensa francesa, se recomienda el molido grueso, que demandará 4 minutos de infusión.
- para que el café no salga lavado o, por el contrario, demasiado saturado, la cantidad precisa es de 21 gramos cada 300 ml (si se hace con prensa francesa) o de 20 g cada 300 ml, si se prepara con filtro. Medir la cantidad de café con cuchara ayuda a salir del paso, pero es impreciso.
“Es fundamental que los granos de café sean de buena calidad y tengan una tostación perfecta. Ese es un aspecto primordial al momento de seleccionar un blend”, recomienda Claudia Salas Martínez.