Cada año, Legatum Institute elabora un ranking con el índice de prosperidad de todos los países del mundo, en base a una serie de categorías como salud, seguridad, economía y libertad personal, entre otras.
“Habiendo visto la prosperidad global mejorar de manera constante entre 2015 y 2019, el Índice de Prosperidad Legatum de este año encuentra que la prosperidad se ha estancado por segundo año consecutivo”, analizan desde el Instituto Legatum.
Aseguran que si bien la meseta de la prosperidad se debe “al menos en parte a las consecuencias económicas y para la salud de la pandemia de COVID-19”, también fue impulsada “por la erosión preocupante de muchas de las características centrales que sustentan la prosperidad”, y en particular alertan por “un deterioro continuo en la responsabilidad política y la libertad de expresión en la mayoría de las regiones del mundo”.
Los números de Argentina en el ranking global de prosperidad
Este año, Argentina se ubica a nivel general en el puesto 57, al igual que en los años 2019 y 2020. Uno de los pilares con peor medición es el de la Calidad Económica, que mide “qué tan bien está equipada una economía para generar riqueza de manera sostenible y con el compromiso total de la fuerza laboral”, en el que nuestro país ocupa el puesto 146.
Al mirar el puesto que obtuvo en esta categoría en los años anteriores, se ve que es el peor puntaje histórico. En 2007, el país se ubicaba en el puesto 99, y el mejor número lo alcanzó en el 2009, con 76 puntos. De 2015 en adelante, cayó de 96 a 146 en 2021, sin ninguna mejora.
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"La calidad económica ha experimentado un importante deterioro en todas las regiones, debido al impacto de las respuestas de COVID-19, con la caída más pronunciada en América del Norte. El FMI informó que la economía mundial se contrajo un 3,6% en 2020, la mayor contracción jamás registrada y más del doble que la experimentada en 2008/9 durante la crisis financiera mundial", sostiene el reporte. "En total, unos 147 países experimentaron una caída del PIB per cápita", agrega.
En contrapartida, el mejor puesto entre las categorías Argentina lo obtuvo en el pilar de Libertad Personal, que mide el progreso hacia los derechos legales básicos, las libertades individuales y la tolerancia social. Aquí Argentina se ubica en el puesto 28, cercano al puntaje que obtuvieron en esta categoría países como Francia e Italia.
En el caso de la seguridad, se evalúa en qué medida la guerra, el conflicto y el crimen han desestabilizado la seguridad de las personas, tanto de forma inmediata como a través de efectos más duraderos, y Argentina está en el puesto 74. El primer puesto en este pilar lo tiene Noruega.
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En la categoría Gobernanza, se mide el grado en que existen controles y restricciones al poder y si los gobiernos operan de manera eficaz y sin corrupción: aquí nuestro país ocupa el puesto 54. En este caso, es Venezuela el país con el peor puesto, el 167.
En el pilar de Capital Social, Argentina se ubica en el número 97: en esta categoría se mide la fuerza de las relaciones personales y sociales, institucionales, confianza, normas sociales y participación ciudadana en un país.
En el caso de la inversión, en el que nos ubicamos en el puesto 79, se mide hasta qué punto las inversiones están adecuadamente protegidas y son fácilmente accesibles.
Otra de las categorías en las que Argentina se ubica en un puesto alejado del ideal, el 117, es en la medición de condiciones empresariales, que analiza el grado en que las regulaciones permiten a las empresas comenzar, competir y expandirse. Los mejores puestos en este caso los tienen Hong Kong, Singapur y Suiza.
El pilar de Infraestructura y Acceso al Mercado, que mide la calidad de la infraestructura que permite comercio y distorsiones en el mercado de bienes y servicios, ubica a Argentina en el número 90.
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En el caso de la medición de la prosperidad en base a las condiciones de vida, se evalúa el grado en que todos experimentan una calidad de vida razonable, incluidos los recursos materiales, la vivienda, los servicios básicos y la conectividad. Argentina está en el puesto 58.
El pilar de la salud ubica a Argentina en el puesto 42, y mide el grado en que las personas están sanas y tienen acceso a los servicios para mantener una buena salud, incluidos los resultados de salud, los sistemas de salud, las enfermedades y los factores de riesgo y las tasas de mortalidad. En un puesto similar se ubican países como Estonia y Eslovaquia.
En cuanto a la Educación, Legatum Institute mide la matrícula, los resultados y la calidad en cuatro etapas de la educación (educación preprimaria, primaria, secundaria y terciaria), así como las habilidades de la población adulta. En este caso, el país está en el número 52, detrás de Uruguay con el 51, y el primer puesto lo tiene Singapur.
Por último, el pilar del entorno natural mide los aspectos del entorno físico que tienen un efecto directo en las personas en su vida diaria y los cambios que podrían afectar la prosperidad de las generaciones futuras, y Argentina se ubica en el puesto 55 del ranking.
ag / ds