La infectóloga del Hospital Muñiz Gabriela Piovano fue escrachada por un grupo antivacunas en el centro porteño este miércoles 27 de enero y, a pesar del mal momento, se fue con una insólita anécdota que contó en televisión.
El relato de la médica que se enfrentó en televisión con el periodista Nicolás Wiñazki contó que uno de los jóvenes que se vio en cámara terminó reconociéndole que tenía "un problema de salud mental".
"Yo me fui y me empezaron a seguir. Me gritaban asesina, la vacuna no está aprobada, la mayoría se fue cuando me fui. Llegando a la 9 de Julio se acerca este muchacho que cuando lo quieren sacar le digo que esperen porque es una persona con problemas de salud mental. Me mira y me dice '¿Y vos cómo sabés?'. Le digo, 'porque soy médica. Y estás medicado', Me mira y me dice 'bueno, pero fue por un golpe en la cabeza'. Y pegó media vuelta y se fue. Eran 20 boludos", contó en C5N entre risas.
Para Gabriela Piovano los sanatorios privados están llenos de macristas
Más allá del insólito caso, advirtió los riesgos de darle entidad a esas teorías: "El problema es cuando habilitan que esas personas debatan, digan lo que dicen y lo dejen pasar a la misma altura que la verdad, entonces es temerario". Y bromeó: "No faltará algún magnicida le va a intentar tirar un tiro a la gorda, imaginate le va a dar en seguida".
Al concluir, pidió que "no se pueden mostrar las voces de quienes creen que la tierra es plana como si esa creencia tuviera algún grado de verosimilitud, fue terrible, se sienten habilitados a hacer cualquier cosa".
JD CP