Tras la viralización de un video en el que se lo escucha "hablar raro" durante la sesión de comisiones de la Cámara alta en el debate por la legalización del aborto, el senador nacional de Juntos por el Cambio, Esteban Bullrich, reveló que sufre de "disartria" a causa de un cuadro de estrés.
Si bien aclaró que su salud "está bien", contó que padece de "un trastorno nervioso que dificulta el uso de los músculos de la boca, la lengua y de las cuerdas vocales, por eso se me escucha hablar raro".
Asimismo, agregó que esta dificultad en el habla comenzó hace algunos meses, en medio de la pandemia, pero que el tratamiento que le sugirieron seguir es solo hacer reposo.
Esteban Bullrich habló de su salud y contó por qué tiene dificultades para hablar
Según informa en su página web el Instituto de Neurología Cognitiva (INECO), la disartria es "una alteración del habla provocada por parálisis, debilidad o incoordinación de la musculatura del habla, de origen neurológico".
El stress de este año, tremendo para todos, me afectó especialmente y me produjo disartria. La disartria es un trastorno nervioso que dificulta el uso de los músculos de la boca, la lengua y de las cuerdas vocales, por eso se me escucha hablar raro.
— Esteban Bullrich (@estebanbullrich) December 15, 2020
Es decir, estas personas comprenden el lenguaje a la perfección y pueden elaborar mensajes verbales, pero al momento de articularlos, surgen las dificultades. "Es común que las disartrias se acompañen de trastornos de la deglución (disfagia), que deberán ser evaluados y rehabilitados lo antes posible a fin de evitar complicaciones en el estado clínico del paciente", afirman.
En cuanto al grado de severidad, las disartrias se clasifican en: leve, moderada y severa.
- Leve: el habla es en general inteligible, con algunas particularidades: pueden tener problemas en la articulación de algunos pocos sonidos de su lengua (fonemas). Habitualmente son los fonemas que requieren una coordinación muscular más elaborada, o en palabras de mayor longitud. Las dificultades radican en sustituir un fonema por otro, omitirlo, o articularlo con imprecisión dando como resultado un sonido ajeno al repertorio lingüístico del paciente. En otros casos, una disartria leve puede manifestarse a través de una alteración en la velocidad y/o la intensidad de habla. La velocidad de habla aumentada (taquilalia) por ejemplo, trae como consecuencia la omisión de fonemas o sílabas afectando la inteligibilidad. A estos pacientes sus interlocutores les suelen solicitar que repita lo dicho o ellos mismos reducen sus expresiones verbales por este motivo. En ocasiones, hay compromiso en la movilidad del paladar blando, dando como resultado una resonancia hipernasalizada.
- Moderada: se observan estos mismos trastornos pero involucrando más sonidos del habla y agravando las dificultades. Los pacientes tienen una articulación desdibujada y dificultosa, y el habla se torna por momentos ininteligible.
- Severa: es muy difícil comprender lo que el paciente está diciendo. La movilidad de los músculos orolinguofaciales está muy comprometida y por eso los procesos fonorrespiratorio, articulatorio y resonancial, están severamente afectados.
¿Qué causa la disartria?
Según INECO, "la disartria puede ser el resultado de un accidente cerebrovascular, un traumatismo de cráneo, un tumor, una infección, una enfermedad degenerativa o enfermedades metabólico-tóxicas o inflamatorias.
En cuanto a la rehabilitación, existe una fase de recuperación espontánea que ocurre inmediatamente después de la lesión. Es muy importante aprovechar este período realizando terapia del habla fonoaudiológica simultáneamente, a fin de incrementar la recuperación lo más posible. Si bien muchas veces las dificultades persisten, con el tratamiento adecuado el nivel de recuperación es importante y mejora el grado de inteligibilidad.
EuDr CP