El Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible de la Nación, en apoyo a la Gendarmería, formó parte del allanamiento a un establecimiento en la provincia de Santa Fe, donde fueron rescatados un tigre de bengala, una leona, un coipo y un carpincho.
Durante la inspección fueron hallados también cuatro cráneos asociados a estos animales a la vez que ejemplares vivos de loro hablador, coipo y carpincho. Continúa la investigación para determinar el paradero de un oso que permanecía allí.
Pudo determinarse además que las personas que administraban aquel campo no contaban con la documentación correspondiente que acreditara el origen legal de los animales, de acuerdo a lo establecido por la ley de conservación de fauna.
La orden para proceder con el allanamiento fue dictada por la Fiscalía Regional 3.ª Circunscripción Judicial de Venado Tuerto, a cargo de Iván Raposo, del Ministerio Público de la Acusación, que llevó adelante las correspondientes tareas de investigación.
El establecimiento rural era conocido como “San Esteban”. Allí, cada uno de los ejemplares era privado de su libertad y mantenido en cautiverio. Se los solía encerrar en jaulas separadas. Dichas jaulas se encontraban en muy mal estado.
El Ministerio de Ambiente Nacional, a través de la Brigada de Control Ambiental (BCA), dio apoyo y asesoramiento a la causa judicial y quedó a cargo del traslado y reubicación de los animales hallados en el interior de la finca.
JFG
