Javier Milei detuvo una entrevista en vivo para firmar un decreto que casi olvida

En plena entrevista en vivo por el canal de streaming Neura, el Presidente de la Nación casi olvida firmar un decreto. Alertado fuera de cámara de que se acercaban las 12 de la noche, plazo máximo que tenía para estampar su firma sobre la resolución, Javier Milei detuvo abruptamente por unos minutos la charla que mantenía con el periodista Alejandro Fantino para levantarse y cumplir con la tarea. El conductor no podía salir de su asombro.

El episodio, sucedido durante la noche del jueves, fue analizado en profundidad durante el pase que comparten en la noche de Bravo TV los periodistas Juan di Natale y Pablo Caruso, conductores de "Comunistas" y "QR", respectivamente. Ambos coincidieron en que la actitud de Milei no fue únicamente llamativa por la forma sino también por el fondo: el contenido del decreto, que el presidente decidió no revelar en cámara.

La secuencia comenzó con el presidente saludando a una persona fuera de plano y lanzando una frase que desconcertó a todos: “Tengo que firmar un decreto”. Al salir de encuadre, Fantino, sorprendido, lanzó una pregunta cargada de incredulidad: “¿Vos me estás hablando en serio? ¿Qué está pasando?”, preguntó entre risas.  Al regresar minutos después, el presidente se limitó a decir que había logrado firmarlo electrónicamente, y cuando fue consultado sobre el contenido del decreto se limitó a tirar la pelota afuera: “No, no importa”, expresó.

Los conductores subrayaron que el presidente despreció el valor y el contenido del decreto. Pablo Caruso reveló de qué se trataba: “Firmó el aumento salarial para trabajadores del Estado y del Hospital Garrahan. Es de apenas arriba del 1%, algo que no se difundió lo suficiente", explicó, y añadió que el Ejecutivo "condena así al atraso salarial a los trabajadores. Por eso no lo cuenta". Según se agregó, el aumento en cuestión es para el período comprendido entre agosto y noviembre del año en curso.

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Los periodistas también criticaron que la firma haya tenido lugar a las apuradas, como si no importara demasiado. La entrevista con Fantino continuó como si nada hubiera ocurrido, incluso abordando temas sensibles como su relación con la vicepresidenta Victoria Villarruel. Sin embargo, el momento quedó registrado como una postal del estilo de gobierno de Milei: disruptivo, impredecible y, en este caso, para muchos, también irresponsable.

BR / FPT