Las acciones de Anheuser-Busch InBev NV se desplomaron luego de que la cervecera más grande del mundo recortó su dividendo por la mitad en un intento por saldar una deuda de US$109.000 millones inflada por la adquisición de su rival SABMiller Plc en 2016.
Las acciones llegaron a caer 11 por ciento en plena liquidación global, el declive más pronunciado desde 2008, y así destruyeron 16.000 millones de euros (US$18.000 millones) en valor de mercado. El fabricante de Budweiser señaló el derrumbe de las monedas de mercados emergentes, lo cual está afectando las ganancias desde que el crecimiento de las ventas en el tercer trimestre desaceleró al ritmo más débil en más de un año.
La pagadora de dividendos más generosa de la industria de los alimentos y bebidas fue golpeada duramente por movimientos cambiarios, entre ellos el del peso argentino, que este año perdió la mitad de su valor. El recorte llega en un momento en el que están en duda otros pagos, como el de General Electric Co. Empresas de bienes de consumo muy endeudadas están teniendo dificultades para reducir el apalancamiento ante la competencia de rivales nuevos y pequeños, pese a que los aumentos de las tasas de interés promulgados por la Reserva Federal de EE.UU. elevan los costos del crédito.
Las ganancias ajustadas antes de intereses, impuestos, depreciación y amortización (Ebitda, por sus siglas en inglés) subieron 7,5 por ciento, afirmó la cervecera con sede en Lovaina, Bélgica. Los analistas anticipaban un crecimiento del 11 por ciento.
Cerca del 58 por ciento de la deuda de la cervecera está denominada en dólares, mientras que algunos de los principales mercados de la empresa son Brasil, Colombia y Sudáfrica. Se trata del mayor retroceso de las acciones desde noviembre de 2008, cuando AB InBev lanzó una oferta de derechos para amortizar deuda vinculada con la fusión de Anheuser-Busch y la belga InBev.
Prudencia
La empresa está optando por ser prudente, dijo su director de finanzas, Felipe Dutra, en entrevista telefónica.
“Si el mundo nos demuestra que fuimos demasiado conservadores, siempre podemos acelerar el ritmo al que se anticipa que crezcan los dividendos”, dijo, y añadió que “no existe ninguna correlación” entre el aumento de tasas de la Fed y el recorte de dividendos, en tanto el 93 por ciento de la deuda de la empresa es fija y sus vencimientos están distribuidos a lo largo de varios años.
“Vemos la volatilidad que hay y queremos ser proactivos”, dijo Dutra. Las presiones colectivas en países como Sudáfrica, Argentina y Brasil han complicado el ambiente, según el máximo responsable financiero.
La cervecera usará los US$4.000 millones que ahorrará para pagar deudas, dijo Dutra a los periodistas en una llamada en conferencia. AB InBev tiene vencimientos por US$1.500 millones este año, US$3.000 millones el año que viene y US$6.000 millones en 2020, dijo.
El mercado estadounidense, donde la empresa ha tenido dificultades para revigorar sus principales marcas, Budweiser y Bud Light, mostró un rebote, en tanto los ingresos volvieron a crecer en el tercer trimestre. En Brasil, los volúmenes de cerveza cayeron cerca de 3 por ciento, más que el mercado en general, dijo Dutra.