La Reserva Federal, que redujo su tasa de interés primaria a casi cero el 15 de marzo frente a la crisis económica provocada por el coronavirus, no anticipa el uso de tasas negativas que se han probado en Europa y Japón, dijeron el lunes dos presidentes de reservas federales.
“En el mejor de los casos, tendríamos que estudiarlo más, pero no anticipo que sea una herramienta que usaríamos en Estados Unidos”, dijo Charles Evans, presidente del Banco de la Reserva Federal de Chicago.
“No soy un gran admirador de entrar en territorio de tasas negativas”, dijo Raphael Bostic, presidente de la Fed de Atlanta.
La semana pasada, operadores en mercados de futuros de fondos federales estaban valorando la posibilidad de que el banco central redujera su tasa de política por debajo de cero, lo que arrastró el rendimiento del Tesoro a dos años hacia un mínimo histórico. El presidente de la Fed, Jerome Powell, ha rechazado constantemente la idea de adoptar tasas de interés negativas, y ese mensaje ha sido repetido por una amplia gama de banqueros centrales de EE.UU. en los últimos años.
En declaraciones desde Atlanta, Bostic dijo que la idea de tasas negativas “excede lo que estoy dispuesto a contemplar ahora”.
Bostic agregó que los funcionarios de la Fed han dicho que todas las herramientas serían consideradas en una crisis, y que el banco central no descartaría ningún remedio potencial.
Una herramienta más débil
“Sin embargo, para mí, las tasas negativas son una de las herramientas más débiles del kit de herramientas, por así decirlo”, indicó. Realmente no estoy anticipando apoyar eso pronto”.
Evans reflejó la misma opinión, en Chicago. Estuvo de acuerdo en que es una herramienta potencial, solo que no busca usarla.
“Diría que, en el mejor de los casos, eso debería estudiarse con más cuidado”, comentó. “Creo francamente que el mecanismo de cómo eso realmente beneficia a las economías necesita ser entendido, al igual que los diferentes incentivos que proporciona a los actores económicos”.
Durante la recesión de 2007-2009, los funcionarios de la Fed consideraron una variedad de herramientas y decidieron no desplegar tasas negativas, señaló Powell en el pasado.
“No consideramos que las tasas negativas sean una respuesta política apropiada aquí en EE.UU.”, dijo Powell a los periodistas el 15 de marzo después de que la Fed redujo la meta de su tasa de interés a corto plazo efectivamente a cero.
El Banco Central Europeo y el Banco de Japón han bajado las tasas de interés a corto plazo por debajo de cero, aunque formuladores de política de ambas autoridades monetarias han mostrado recientemente una reticencia a adentrarse aún más en territorio negativo.
Bostic también rechazó otra idea que algunos inversionistas han planteado: que el banco central podría comprar acciones.
“Eso no es algo que contemplemos como primer paso”, dijo. “Ese tipo de apoyo generalmente se realiza mejor a través de lo fiscal y no de lo monetario”.