Renaissance Capital, que ha pronosticado correctamente ocho de nueve decisiones de calificación soberana en la Europa emergente y Oriente Medio desde mayo, anticipa una rebaja de la nota de Sudáfrica al rango de basura el próximo mes.
Esa opinión contrasta con la de la mayoría en una encuesta de Bloomberg, pero el economista jefe de Renaissance Global, Charles Robertson, mantiene que los fundamentos de Sudáfrica se han deteriorado significativamente desde mayo, cuando Moody’s Investors Service afirmó su calificación Baa3. La próxima revisión está prevista para el 1 de noviembre.
“Los números macro no respaldan un mantenimiento del grado de inversión de Sudáfrica”, dijo Robertson en un comentario a los clientes. “Un crecimiento deficiente, finanzas públicas difíciles, una perspectiva moderada de las materias primas, tensión en las calles como se ha visto con los disturbios anti-nigerianos, incertidumbre sobre la capacidad del presidente para impulsar su agenda... todo ello es preocupante”.
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La capacidad del presidente Cyril Ramaphosa para introducir reformas económicas importantes está limitada por su débil control sobre el Congreso Nacional Africano, el partido gobernante profundamente dividido, y la oposición de su sindicato y aliados del Partido Comunista, que se oponen a la privatización, por temor a la pérdida de empleos. El lento ritmo de actuación ha frustrado a los inversores, arrastrando la confianza empresarial al nivel más bajo desde 1985 y golpeando el rand.
Desde mayo, Robertson y su equipo han anticipado correctamente las decisiones de calificación de Turquía, Pakistán, Abu Dabi, Catar, República Checa, Rusia, Hungría y Polonia. Su predicción para Arabia Saudita fue incorrecta.
No obstante, la mayoría de los encuestados en un sondeo de Bloomberg dijo que esperaban que Sudáfrica mantenga la calificación de grado de inversión de Moody’s, al menos para este año.
Moody’s es la única agencia calificadora importante que tiene un grado de inversión para la deuda de Sudáfrica. S&P Global Ratings y Fitch Ratings redujeron sus calificaciones a basura en 2017. Moody’s tiene una perspectiva estable para Sudáfrica, lo que significa que es poco probable que cambie la calificación de inmediato.
“El mejor argumento de que la rebaja no ocurrirá este año es que Moody’s no tiene (a Sudáfrica) en observación negativa”, dijo Robertson. “Es inusual rebajar sin haber hecho eso primero”.