Rusia dijo que no recibió indicios de que Estados Unidos esté listo para renovar el histórico tratado de reducción nuclear New START, que limita sus arsenales estratégicos, antes de que expire en febrero.
“Todavía no hemos recibido ninguna señal de Washington que pueda indicar la voluntad de extender el Nuevo START después de que expire”, dijo el jueves el viceministro de Relaciones Exteriores ruso, Sergei Ryabkov, en una mesa de diálogo en línea organizada por el club de discusión Valdai. “Creemos que este acuerdo es necesario no solo para los países que lo firmaron, sino como salvaguarda de estabilidad estratégica”.
Hasta el momento, el presidente de EE.UU., Donald Trump, ha rechazado los llamados rusos para comenzar las conversaciones sobre la extensión del tratado, diciendo que cualquier nuevo acuerdo debería incluir a China, que se niega a aceptar límites a su capacidad nuclear mucho más pequeña.
El tratado de 10 años, el último que limita las fuerzas nucleares de los antiguos enemigos de la Guerra Fría, tiene la opción de renovarse por otros cinco años con el acuerdo de ambas partes.
Rusia está dispuesta a negociar un nuevo acuerdo de control de armas, pero esto llevará tiempo, que es lo que la extensión del nuevo START entregará, dijo Ryabkov.
Han ido aumentando los temores de una renovada carrera armamentista desde que EE.UU. se retiró el año pasado de un tratado de 1987 que prohibía el despliegue de misiles de alcance intermedio en Europa, aludiendo a violaciones negadas por Rusia.
Un segundo pacto estratégico de armas expirará en cuestión de meses, lo que arriesga destruir décadas de esfuerzos de control de armas.
En virtud del Nuevo START, o START III, que siguió al tratado START de 1991 y se firmó en 2010, los arsenales atómicos de Rusia y EE.UU. se restringen a no más de 1.550 ojivas nucleares desplegadas y no más de 700 lanzaderas de misiles intercontinentales balísticos no desplegados (ICBM), lanzaderas submarinas para misiles balísticos (SLBM) y bombarderos nucleares desplegados u operativos. Cada una de las partes puede inspeccionar los arsenales de la otra 18 veces al año.