Noche de Cúpulas: cómo ver a Buenos Aires desde arriba
Habrá cocina contemporánea junto a las performances artísticas más innovadoras de la escena local. Experiencias site-specific de artes escénicas y poéticas en locaciones de gran valor histórico.
Cupulas de Buenos Aires. Historia acompañada de los mejores vinos y whiskies. Además, intervenciones escénicas, performances poéticas y música. |
gza. carolina alfonso prensa
Raul Zolezzi
“Tendí cuerdas de campanario a campanario; guirnaldas de ventana a ventana; cadenas de oro de estrella a estrella, y danzo”. Así reza el epígrafe de Arthur Rimbaud con el cual los organizadores de esta nueva edición de Noche de Cúpulas identifican la “experiencia”.
Por definición una cúpula es lo más alto, tiene algo de sublime ya que nos acerca al cielo y, por eso, a Dios. Pero la altura también es cosa de funámbulos (y de gatos, pero en este caso no tiene importancia). El funambulismo implica concentración, silencio, audacia. No es cosa de todos los días andar por la cuerda floja, ¿o sí? Seguramente serán pocos quienes recuerden que el humorista Alberto Olmedo fuera, allá en Rosario, en sus años dorados, un dotado funámbulo y acróbata, algo que siempre llevó consigo y que seguramente lo impulsó a traspasar astutamente los límites. Hasta ese resbalón final.
Toda esta introducción es solamente para poder citar una de sus frases memorables: “Si la vamo a hacé, la vamo a hacé bien”, proclamaba el bufo, mientras se ponía peluca y boa de plumas al cuello. Una máxima olmediana que parece, a ojos vista, ser muy respetada por los organizadores de este múltiple evento que combina la gastronomía, el teatro, la música y la arquitectura. Si no lo creen pasen y vean:
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El 4 y 5 de diciembre, a las 21. En la Cúpula Arnoldo Albertolli, ubicada en el corazón de Palermo –diseñada por Arnoldo Albertolli en 1914– reboza historia, arte y diseño. Fue restaurada y modernizada por completo respetando las estructuras originales, lo que la convierte en uno de los lugares más exclusivos de Bs.As.
El 12 y 14 de diciembre, a las 21. En la Cúpula Edificio La inmobiliaria. De estilo neorrenacentista realizada por el Arquitecto Luigi
Broggi en 1909 e inaugurada en 1910 con motivo de los festejos del Centenario. Posee dos cúpulas gemelas de color rojizo, una en cada esquina con sus ochavas coronadas con estatuas de los dioses griegos Venus y Apolo. Ambas son símbolo de Buenos Aires tanto en Argentina como en el exterior.
El 21 de diciembre en el Palacio Estrugamou. En el año 1905 la familia Estrugamou encargó la construcción del palacio. El edificio, recientemente reciclado, fue declarado construcción protegida por la Legislatura de la CABA dada su historia, arte y simbolismo.
En todas las jornadas se servirá una cena de cinco pasos de cocina contemporánea elaborada por Ale Langer junto a Diquint Eventos & Catering con las mejores etiquetas de vinos, espumantes y whiskies. Habrá intervenciones escénicas con dirección de Juan Parodi y actuación de María Merlino, performances poéticas, musicalización a cargo de Quinta y DJ en vivo durante todo el evento con música exclusivamente diseñada para cada experiencia sensorial.
La fiesta en el Palacio Estrugamou será también el gran cierre del ciclo y al mismo tiempo, una celebración para recibir el año 2020 que se acerca pleno de renovados proyectos y esperanzas. Será además, anticipo de las Noches de Cúpulas 2020 que comenzarán el año con una intervención en la Torre Monumental, en el marco del FIBA y en distintos palacios, iglesias y cúpulas de la Ciudad.
La producción ejecutiva está a cargo de Ale Langer y la producción artística y curaduría a cargo de Ana y Verónica Groch. Noche de Cúpulas cuenta con el apoyo del Fondo Nacional de las Artes (FNA), del Festival Internacional de Buenos Aires del Gobierno de la Ciudad (FIBA) y del Ente Nacional de Comunicaciones (Enacom).
