La declaración salió ayer de la boca del entrenador xeneize Abel Alves y tembló todo el mundo Boca. “Tenemos que entender que todo tiene su límite y su tiempo. Hoy con el nombre no se puede ganar. Respeto a todos, pero no me va a temblar la mano para sacar a alguno", disparó el ex dt de la reserva azul y oro.
Los malos resultados que terminaron con el ciclo de Alfio Basile y están atormentando el comienzo del Clausura piden cambios rápidos en el equipo. Alves, que está dispuesto a hacerlos, cuenta con la venia de los dirigentes. “El técnico tiene el respaldo para hacer los cambios que considere necesarios y éste es el momento de tomar decisiones”, dijo el vicepresidente José Beraldi.
En una decisión que tiene ya casi definida, el técnico Alves le dará descanso, pensando en el partido del próximo domingo frente a Atlético de Tucumán en la Bombonera, a dos de los históricos con más títulos en el club: Roberto Abbondanzieri y Hugo Ibarra. No es que todos los problemas del equipo pasen por estos nombres, pero sus niveles están muy lejos de ser los que los llevó a ser multicampeones. El arquerito Javier García y el juvenil Santiago Villafañe serían los reemplazantes.
Sin embargo estos no son los únicos que están en la cuerda floja. Claudio Morel Rodríguez es otro de los que corre peligro, aunque el domingo jugaría igual: Gabriel Paletta fue expulsado el sábado pasado frente a Newells y Luiz Alberto, el último refuerzo, no está en ritmo. El paraguayo pasaría a jugar de segundo marcador central y en su lugar entraría Fabián Monzón.
Justamente Paletta es el otro jugador que está en la mira. Como en la última fecha vio la roja en Rosario su salida del equipo es obligada. Lo que tendrá que develarse con el correr de los días es si volverá al equipo titular. De la mitad de la cancha para arriba, todo seguiría igual. El problema, está abajo.
