Aunque se respaldan mutuamente, nadie lo hace

Tal como se preveía, León Arslanian, ministro de Seguridad de la Provincia de Buenos Aires, dijo hoy a través de un comunicado de prensa que apoyará la decisión de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) en caso que el organismo que preside Julio Grondona crea necesario suspender la fecha del fútbol este fin de semana.

Además de prestar su conformidad con la eventual suspensión del fútbol, Arslanian aclaró que “comparte en un todo” la decisión del Comité Provincial de Seguridad Deportiva (COPROSEDE) de no prestar servicio policial adicional a aquellos clubes cuyos hinchas participen en actos de violencia.

El comunicado del Ministerio de Seguridad provincial también hizo referencia a la posibilidad de tomar otras medidas que contribuyan a solucionar el problema, tales como “eventuales quitas de puntos, desafiliaciones, prohibición de ingreso de espectadores, ejercicio del derecho de admisión por parte de los organizadores o cualquier otra disposición”.

El documento se elaboró en respuesta a una nota de la AFA que ponía a consideración del organismo de seguridad de la Provincia “la posibilidad de suspender las actividades deportivas de la fecha que se disputará el fin de semana venidero en todas sus categorías”.

"En virtud del ofrecimiento realizado, le solicitamos tenga a bien dar urgente tratamiento a esta propuesta a fin de tomar las medidas pertinentes en tiempo útil, dada la complejidad en la organización de los torneos y sus respectivos calendarios", finaliza la nota firmada por el presidente Julio Grondona y el secretario general José Meiszner.

La respuesta de Arslanian, entonces, no parece aportar demasiado, ya que casi en los mismos términos, le devuelve la gentileza a Grondona, traspasándole el peso de tomar una decisión tan polémica como la de suspender el fútbol en una fecha en la que debe disputarse el superclásico entre River Plate y Boca Juniors.

Por su parte, en la reunión que el Comité Ejecutivo de AFA realizó ayer, se habría acordado que la fecha se juegue y, en caso de producirse nuevos hechos de violencia, se tomaría la determinación de parar las actividades. Solamente, cabe esperar que no sea demasiado tarde.