Una era nueva, pero con formato viejo. El regreso del fútbol televisado por capitales privados mantuvo los recursos conocidos y presentó pocas novedades. Las diferencias principales, como era de esperarse, estuvieron en el acceso. Un escenario habitual para quienes contrataron el servicio. Uno diferente para quienes decidieron no pagar.
Tigre-Vélez fue el partido que levantó el telón de la Superliga y le abrió paso al nuevo ciclo. TNT Sports estuvo a cargo de la transmisión (Fox Sports lo hizo luego con Banfield-Belgrano) y mostró caras conocidas y conceptos televisivos ya aplicados. A las 18, una hora antes de que la pelota comenzara a rodar, arrancó la transmisión para aquellos que ya tenían contratado el pack que se ofrece a 300 pesos por mes. Fue la primera diferencia fuerte: quienes sólo tenían el servicio básico de televisión por cable debieron esperar hasta el inicio del encuentro para engancharlo en el canal TNT clásico, y no pudieron verlo en alta definición. Quienes sólo contaban con canales de aire debieron apelar a la radio, las redes o hacer otros planes.
Hernán Feler en relatos, Fernando Pacini en comentarios, y Angela Lerena y Manuel Olivari en campo de juego fueron los periodistas al frente del bautismo del ciclo. Todos nombres que venían de la era anterior y con la distribución acostumbrada. Los recursos y efectos en pantalla tampoco arrojaron novedades: un nuevo logo (el de la Superliga, con sus siglas SAF y sus tonos violetas y azulados) aplicado al círculo central, los mismos gráficos en la cancha para marcar la distancia de una barrera en un tiro libre, similares formas de repetir una jugada o congelarla para determinar la existencia o no de una posición adelantada.
La presentación de las formaciones de los equipos mostraron, en cierta medida, un retroceso: siluetas humanas hechas por computadora en vez de imágenes animadas de los jugadores a las que nos acostumbró el Fútbol para Todos. Un aporte mínimo: las alineaciones y suplentes fueron repetidas en videograph durante el primer tiempo. Y una diferencia: menos publicidades en medio del partido. La exclusividad fue de la propia señal para promocionar el pack pago, y de la compañía petrolera que auspicia el torneo (Axion Energy).
La transmisión tuvo su correlato en Twitter, y allí quedó resuelta una de las mayores incógnitas: la cuenta de TNT Sports tuiteó videos con las jugadas más trascendentes, incluso los goles. Seis minutos pasaron hasta que el primer gol del nuevo ciclo (obra de Maximiliano Romero, de Vélez) llegara a las redes sociales.
Veintitres detenidos
En la previa del partido, la Aprevide detuvo a 23 integrantes de la barrabrava de Tigre, autodenominada La Trece, que tenían intención de ingresar a la tribuna que comanda el “Negro” Fiorucci, líder de la facción oficial. Según informó el titular del organismo, Juan Manuel Lugones, “entre los detenidos se encuentra Marcelo Pauliti, capo de este grupo de delincuentes y uno de los que estuvieron señalados por el homicidio de un hincha de Tigre en el año 2013 y fue sobreseído”. En el ingreso a la cancha se produjo la detención de otros cinco simpatizantes de Tigre, por contravenciones varias.