El novel piloto alemán Sebastian Vettel de la escudería Toro Rosso pateó hoy el tablero de la Fórmula 1. Sorprendiendo al mundo, el germano de sólo 21 años obtuvo su primera victoria en el Gran Premio de Italia, decimocuarta de las 18 carreras del campeonato del mundo 2008, en el circuito de Monza. La gran tarea que Vettel había cumplido en la clasificación de Vettel, conmocionante, se consideraba entre los entendidos como un chispazo y se daba por sentado que Ferrari o Mac Laren pondrían en carrera "las cosas en su lugar".
Sin embargo, al cabo de una carrera disputada bajo una fina lluvia y con una pista que se fue secando con el paso de las vueltas, Vettel, de sólo 21 años, superó al finlandés Heikki Kovalainen (McLaren-Mercedes) y al polaco Robert Kubica (BMW Sauber), mostrando que lo de la clasificación no era casualidad.
Kubica, que salió desde la undécima plaza, firmó una bonita remontada gracias a una estrategia acertada que le permitió calzar los buenos neumáticos en el momento adecuado.
Después de haber sido el piloto más joven en firmar una 'pole position' el sábado, Vettel se convirtió en el vencedor más joven de un Gran Premio. El español Fernando Alonso (Renault) fue cuarto delante de Nick Heidfeld (BMW Sauber), Felipe Massa (Ferrari) y Lewis Hamilton (McLaren-Mercedes), autor también de una bonita remontada de la decimoquinta a la séptima plaza.
Mark Webber (Red Bull) sumó el último punto con su octava posición, delante del actual campéon del mundo Kimi Raikkonen (Ferrari). El peor parado fue Sébastien Bourdais (Toro Rosso), que caló su motor en la parrilla y no pudo aprovechar la mejor posición de salida de su carrera. En lugar de partir cuarto, el francés salió desde boxes con una vuelta de retraso con todo el pelotón. Terminó decimoctavo, una cruel decepción.
Con la lluvia que prácticamente no había dejado de caer desde la mañana, la pista estaba encharcada y la salida se dio detrás del coche de seguridad.
Vettel, gracias a una buena visibilidad en cabeza del pelotón, se escapaba, y detrás Hamilton comenzaba su festival de adelantamientos. El británico había ganado trece plazas y ocupaba el segundo puesto cuando paró en boxes.
El líder del campeonato volaba sobre la pista, pero su estrategia a una sola parada se vino abajo cuando la pista se fue secando: los pilotos regresaron a boxes para montar neumáticos intermedios, y el británico también se vio obligado a volver a entrar. Su remontada acabó en la séptima plaza, justo después de su principal rival en el campeonato, Massa.
Fuente: AFP.