La confusa salida de Ricardo Caruso Lombardi de la dirección técnica de Argentinos Juniors, argumentada por el propio protagonista en un "mal estado de salud y de ánimo", está "influida por el accionar de algunos barrabravas del club", según refirió un allegado a la dirigencia.
"Caruso Lombardi no quiso revelar los verdaderos motivos de su alejamiento, pero está muy afectado por cosas que bajaron de la tribuna. Y en esto tiene mucho que ver un barra muy conocido entre los hinchas de Argentinos Juniors", le confió la fuente a la agencia oficial Télam.
Justamente hace dos semanas el verborrágico entrenador, de extensa trayectoria en el fútbol de ascenso, había padecido una agresión extraña. Fue atacado a golpes de puño por un incidente menor, en una estación de servicio cercana al Acceso Oeste.
El técnico le apuntó a un presunto "toque" de su camioneta a otro automóvil, cuyos ocupantes reaccionaron violentamente. Según el informante, "el asunto no estaba desligado de su situación en Argentinos Juniors".
"Es que los dirigentes del club le habían ofrecido una semana atrás renovar su contrato hasta junio de 2008, pero Caruso Lombardi empezó a tener problemas con un sector de la barrabrava y lo rechazó", amplió la fuente.
Antes, el entrenador se había mostrado muy conforme con los jugadores que él había recomendado -la mayoría sin demasiada fama- y provenían en muchas casos de la Primera B Nacional, con excepción del 'lungo' Alejandro Delorte, ex delantero de Olimpo de Bahía Blanca, Gimnasia y Esgrima La Plata, Peñarol de Montevideo y Brescia de Italia.
Ricardo Caruso Lombardi nació el 10 de febrero de 1962 y debutó como volante "de marca" en 1981, con 19 años. Fue cuando Argentinos Júniors evitó el descenso con el penal que el uruguayo Mario Alles le atajó al sanjuanino Eduardo Emilio Delgado y condenó a San Lorenzo en cancha de Ferro.
Hace un mes el técnico se mostraba exultante con el sorpresivo triunfo de su equipo sobre Boca Juniors, campeón de América 70 días antes de visitar el estadio Diego Armando Maradona. "Esto es para los que decían que los que traje eran grandotes y troncos", ironizó.
"Pero evidentemente todos sabían que algo más pasó que el bajón anímico para que Caruso renunciara, porque los dirigentes le pidieron que mejor no fuera a ver el partido del sábado pasado con Colón, para evitar problemas con un sector de la hinchada", ejemplificó el allegado.
"Ricardo vivió el sueño de su vida deportiva: dirigir Argentinos Juniors en primera división y recomendado nada menos que por Diego Armando Maradona. Era lo que él quería. Por eso las razones de su renuncia no resultaban demasiado creíbles", puntualizó el informante.
Hace unos años, muy cerca de la Paternal, en Floresta, cuando era técnico de All Boys, Caruso se enfrentó a golpes con algunos hinchas de ese equipo. "Me tienen harto. Son una manga de drogadictos", les gritó. "Esta vez la situación fue más fuerte", completó la fuente.
Fuente: Télam.
