Entre el glamour y las sospechas: así parece estar la FIFA hoy, a sólo un día de la gran fiesta que se realizará en la sede que el organismo tiene en Zurich para elegir a los países organizadores de los Mundiales de 2018 y 2022. Salpicada por presuntos casos de corrupción en los que habrían participado varios de sus miembros, la entidad que conduce Joseph Blatter tratará de salir airosa de la elección, mientras el desfile de personalidades ya ha comenzado en la capital suiza.