La muerte de Emanuel Ortega a primera hora del jueves derivó en la suspensión de todas las divisionales del fútbol argentino. Luis Segura, presidente de AFA, dio a conocer la noticia cerca del mediodía y la pelota pasó a segundo plano. Allí, versiones cruzadas sobre la seguridad de los estadios de las categorías menores, la salud de los jugadores y demás menesteres cobraron fuerza en los medios de comunicación. No obstante, el Ascenso una vez más quedó en el olvido. Apenas una docena de horas después de acaparar la atención del país entero. El bochornoso final de Boca-River, el desenlace, el qué dirán, picó en punta. Y así como en la cotidianidad, ésta es la pantalla en la cual transitan los dirigentes en un año clave para ocupar el cargo máximo en las oficinas de Viamonte 1366.
La grieta, pero en el fútbol. Dentro del mundo de AFA existe una grieta más entre la Primera División y el Ascenso. Los ingresos de Fútbol para Todos se reparten escalonadamente en todas las categorías del país desde el máximo nivel hasta la Primera D. Y aquí, el dinero juega un rol importante en la carrera por la presidencia de la Casa Madre del balón argentino. El “grondonismo” luchó para el beneficio de todas las instituciones con la plata de la TV pero los poderosos no se alegraron con esa decisión por ser los genuinos generadores de los recursos de la
pantalla chica.
El lamentable accidente de Emanuel Ortega provocó otra prueba de la disparidad entre los “bandos”. El Ascenso –liderado por el miembro del comité ejecutivo y el presidente de Barracas Central, Claudio “Chiqui” Tapia, encabezó la iniciativa de que todos los clubes salieran con una bandera de “Fuerza Emanuel” el fin de semana pasado a diferencia de la Primera División (salvo el club formador de la víctima, Banfield), que se abocó al canto del Himno en el aniversario de su creación. ¿Casualidad? No obstante, no hubo bandas entonando la canción patria en las canchas del Ascenso, en contraste con lo anteriormente mencionado.
Las caras visibles. Los candidatos a presidente juegan sus cartas a su manera. Marcelo Tinelli –en “representación” de los más poderosos de la pelota– y Claudio Tapia –con la bandera del Ascenso– entraron en una carrera directa hacia las elecciones de octubre de la AFA. El conductor televisivo apuesta a su poder mediático, sus relaciones políticas llevadas a la pantalla chica y su –corta y efectiva– experiencia como directivo de San Lorenzo para alcanzar el máximo escalón del fútbol argentino. Incluso, en su regreso a la TV en este 2015, cruzó palabras con el precandidato oficialista, Daniel Scioli, y ambos coincidieron en el afán por el trono máximo en sus líneas dirigenciales: el actual gobernador de la provincia de Buenos Aires apuntará al sillón de Balcarce 50 mientras que el dueño minoritario de Ideas del Sur buscará acceder al de Viamonte 1366.
Los dirigentes de AFA no desestiman la capacidad y generación de negocios fructíferos ni tampoco la popularidad de Tinelli, pero sí le exigen que haga “escuela” como dirigente deportivo. Ahí aparece la figura de Tapia con el apoyo de sus pares del Ascenso y la experiencia de tantos años en la Casa Madre. “Parece que nos están subestimando a todos los dirigentes del fútbol argentino, ¿no?”, lanzó en Twitter el candidato impulsado por las categorías menores tras el debut de ShowMacth y el aval de los candidatos presidenciables Scioli, Macri y Massa. La bandera de Tapia lleva consigo el “grondonismo” en estado puro.
Despedida en Jujuy
Los restos del futbolista de San Martín de Burzaco Emanuel Ortega, fallecido el jueves tras once días de internación luego de sufrir una fractura de cráneo durante un partido contra Juventud Unida, fueron despedidos ayer en la Iglesia de San Expedito de esta ciudad.
Fue un acto íntimo y sin acceso a la prensa, con familiares y allegados al joven, cuyo pase pertenecía a Banfield.
Luego, el cuerpo fue trasladado a la provincia de Jujuy, de donde era oriundo el jugador, y se le realizará otra despedida, en el club Talleres de Perico.
La tragredia se disparó el pasado 3 de mayo, a los 44 minutos del primer tiempo de un partido entre San Martín de Burzaco y Juventud Unida, por la Primera C. Ortega disputó un balón con un rival y se golpeó contra la base de cemento que sostiene el alambrado de la cancha de su club, por lo que fue internado en grave estado.
La suspensión del fúbtol de este fin de semana alcanzó primero a la divisional donde jugaba y luego se extendió a todas las categorías del fútbol argentino.
