River está cada vez más cerca del partido más esperado de su historia. Quizás por eso, cada movimiento que hace Marcelo Gallardo, cada cambio que piensa y ejecuta, se convierte rápidamente en una noticia que repercute aquí y allá. Ayer pasó algo de eso: el técnico sorprendió con la inclusión de Luis González en el mediocampo del equipo que se perfila para el debut en el Mundial de Clubes de Japón, el miércoles a las 7.30 (hora argentina), ante el ganador del local Sanfrecce Hiroshima y el Mazembe FC, de la República Democrática del Congo.
Lucho González entró por Leonardo Pisculichi, quien quedó relegado al conjunto suplente. Lucho se ubicó unos metros por delante de
Carlos Sánchez, Matías Kranevitter y Leonardo Ponzio, en un ensayo formal en el que los once que serían titulares en el debut le ganaron 3-0 a los habituales suplentes, con dos goles del uruguayo
Rodrigo Mora y el otro de Lucas Alario.
Pero a pesar de su ingreso, la titularidad de Lucho todavía no está garantizada. Es cierto, corre con ventaja con respecto a Pisculichi y Gonzalo Martínez, las otras alternativas que maneja Gallardo en esa posición. ¿Por qué? Porque González obtuvo un plus luego del buen papel en los segundos tiempos de la serie ante Huracán por la Copa Sudamericana.
Justamente, Pisculichi no pudo estar ante el Globo por una seguidilla de lesiones que le dificultaron su puesta a punto en el último tramo del año. Por esa razón, y por el buen rendimiento de González en los recientes partidos, Gallardo parece inclinarse por él. “Es clave que recupere su nivel, porque en el plantel no tenemos a un jugador de sus características”, dijo sobre Pisculichi el DT, consultado por el diario Olé.
Lucho González también jugó poco, pero especialmente en la primera parte del semestre. A pesar de sufrir un desgarro y de que muchas veces debió ingresar desde el banco, al ex jugador del Olympique de Marsella y del Porto le alcanzó para ofrecer algunos destellos de su juego. Allí están, para validarlo, los goles que les hizo a Boca (en la victoria en el amistoso en Córdoba) y a Estudiantes.
Aunque su ingreso –como el de los otros diez hombres– no está confirmado, el ensayo de Gallardo fue toda una señal de lo que en principio sería la formación para el estreno en el Mundial de Clubes. Se confirmará, por supuesto, en las próximas prácticas en el Akitsu Soccer Stadium, en la localidad de Chiba, a unos 50 kilómetros de Tokio. Allí es donde River prepara la semifinal contra el Sanfrecce o el Mazembe, el paso previo al soñado encuentro contra el Barcelona de Lionel Messi.