"Emoción violenta": así caratuló el abogado de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA), Hugo Pasos, el estado en que Diego Maradona profirió su consabida apelación a "seguir chupándola" tras el triunfo del Seleccionado sobre Uruguay, en un escrito que, a modo de descargo, el ente rector del fútbol nacional envió el martes a la FIFA para defender al DT de una posible sanción que podría impedirle sentarse en el banco durante el Mundial.
"Maradona actuó en estado de emoción violenta por cruces con periodistas en los días previos al partido", expresa concretamente la defensa hecha por Pasos, de acuerdo a lo que el propio abogado comentó anoche a la prensa en una charla informal en que no dio mayores precisiones sobre cuáles fueron esos "cruces" entre el seleccionador nacional y el periodismo.
De esta manera, la AFA se puso a la cabeza de la defensa de un Maradona que, por su lado, no se muestra arrepentido ni ha pedido perdón alguno por sus palabrotas, que calificó como "un desahogo". Esa actitud desafiante del otrora genio del fútbol mundial causó al parecer un profundo malestar en la dirigencia de la FIFA, con la que el ex capitán y figura del Seleccionado ya se enfrentarar en varias oportunidades.
Lo concreto es que, si bien no comunicó manejar plazo alguno para emitir el correspondiente fallo, la FIFA estudia hoy una sanción que incluiría cinco partidos oficiales de suspensión y 20.000 francos suizos (19.800 dólares) de multa para Maradona, quien sólo argumentó en su defensa que hubo periodistas que lo criticaron "con mala leche".