Luego de la dura goleada por 4 a 0 que sufrió ante Flamengo en Río de Janeiro por la Copa Sudamericana, en el regreso del fútbol local, San Lorenzo sabía que tenía que ganar o ganar para alcanzar la cima del torneo, al menos hasta que Boca jugara su partido ante Banfield. Y la chance era inmejorable ya que enfrente estaba un Belgrano de Córdoba que llegaba antecedido de una preocupante racha adversa de seis empates y cuatro derrotas consecutivas, que lo tenían en la penúltima posición de la tabla.
Y, aunque no fue el San Lorenzo contundente que pretende su entrenador, el uruguayo Diego Aguirre, al Ciclón le alcanzó con aprovechar los errores defensivos de su rival para quedarse con los tres puntos. Al minuto de juego, avisó por primera vez a través de un centro de Cerutti para Blandi que Aveldaño logró desviar al córner, y un minuto más tarde Angeleri no pudo o no supo sacarle provecho a un tiro libre desde la medialuna que terminó en las manos de Acosta, que debutaba en el arco del Celeste. Pero sobre los 7 el Nuevo Gasómetro casi se enmudeció cuando un centro de Suárez, tras una gran carrera por izquierda, no pudo ser conectado por Bieler en el punto del penal.
Y de los errores del conjunto cordobés iban a llegar los primeros dos goles de la tarde. A los 23, a la salida de un tiro de esquina desde la derecha el chileno Paulo Díaz madrugó a los centrales para abrir el marcador y, a los 39, tras un clarísimo penal de Espíndola sobre Díaz, Néstor Ortigoza iba a poner el 2-0 que les daba la tranquilidad que necesitaban, al tiempo que parecía decretar el desmoronamiento del Pirata.
Sin embargo, a los 50, Christian Lema le ganó en el cabezazo a Marcos Angeleri a la salida de un córner ejecutado por Suárez desde la derecha y mandó la pelota al fondo del arco de Torrico. Con un San Lorenzo que se retrasó en la cancha, Belgrano fue en busca de un milagro que no logró concretar fue por la gran intervención del arquero azulgrana: a los 66 desvió con la pierna un remate de Melano y diez minutos después se jugó la vida ante Bieler.
San Lorenzó ganó, pero dejó muchas dudas y sufrió más de la cuenta.