En Sarandí, Arsenal y River igualaron 3-3 en el partido que abrió la 10ª fecha de la Superliga. Piovi, Kaprof y Giménez marcaron para los del Viaducto, mientras que Scocco, en dos oportunidades, y Torrent, en contra, convirtieron para el Millonario, que jugó con suplentes.
Si hay una causa por la que el River del Muñeco Gallardo no pudo ganar ninguna liga local es porque suele perder puntos en los partidos cercanos a los torneos internacionales. Y a eso apostó Arsenal, que salió a presionar al Millonario en la mitad de la cancha, jugando la pelota corta por las bandas y buscando lastimar a través de los centros cruzados de Piovi y Suárez, ante un River que se mostraba sorprendido y fastidioso ante el planteo ofensivo que le proponía el local.
Así, sin ser más, en la primera clara que tuvo a su favor, Arsenal no perdonó y facturó: Giménez ejecutó un tiro de esquina desde la derecha para que, tras un rechazo corto de Scocco, Ezequiel Piovi sacara una tremenda volea de derecha que se metió junto a la base del palo derecho del arquero millonario, Enrique Bologna, de floja respuesta.
El golazo entonó aún más a los del Viaducto, que lejos de replegarse en su campo fueron en busca del segundo gol, mientras River sólo apostaba a alguna contra salvadora vía Scocco o Pratto que corrieron más de lo que generaron.
Los de Gallardo no la pasaban bien, le costaba mucho el retroceso -Angileri y Nahuel Gallardo no hacían pie-, y pagó caro los errores defensivos: Giménez robó una pelota en la mitad de la cancha para habilitar al ex millonario Juan Cruz Kaprof que, tras correr unos 25 metros, dejó en el camino a Bologna y puso el 2-0 ante un River totalmente desorientado y deshilachado.
Como era de esperar, en el complemento River salió con todo en busca del descuento, que llegó a través de una tremenda volea de derecha de Scocco que parecía darle vida.
Con los dos equipos entregados por completo al ataque, el partido cobró en emoción y goles: Giménez fusiló por tercera vez en la noche a Gagliardo y, un par de minutos más tarde, Scocco volvió a decir presente en la red para poner la historia 3-2, esta vez con un cabezazo sobre el segundo palo, tras un remate previo de Pratto que se había estrellado en el travesaño.
Y a cuatro del final llegó la igualdad definitiva a través de un gol en contra de Torrent, que convirtió en su intento por despejar un centro de Suárez. Arsenal sufrió por la victoria que se le escapó al final.