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Y al final, un puntito para cada uno no le hizo mal a ninguno

En Madrid, el Atlético y el Barça no se quitaron la punta: el 0-0 dejó a ambos en la cima de la tabla. Messi jugó el segundo tiempo. Simeone y Martino, conformes.

Rodeado. La presión del Atlético sobre los rivales se advierte en esta escena: tres jugadores intentan bloquear a Messi, que tuvo apenas una oportunidad clara de gol.
| AFP

El Atlético de Madrid y el Barcelona protagonizaron un pobre empate sin goles en el estadio Vicente Calderón y finalizaron así la primera rueda de la Liga española de
fútbol como colíderes.El partido más esperado de los últimos meses, que enfrentaba a los dos mejores equipos de España en la temporada, terminó en una igualdad con más lucha y fricción que fútbol.
El equipo conducido por Diego Simeone apostó al juego físico y al orden defensivo, mientras que el Barcelona dirigido por Gerardo Martino no pudo sacarle el rédito a su juego asociativo, especialmente en la primera mitad, cuando no tuvo en sus filas a Lionel Messi y a Neymar. Los dos jugadores más trascendentales del club azulgrana iniciaron el duelo en el banquillo y luego no pudieron desequilibrar demasiado durante la segunda parte.
Así, el Atlético y el Barcelona finalizaron la primera vuelta nada menos que con 50 puntos, con seis de ventaja sobre el Real Madrid, que mañana se enfrentará al Espanyol. El punto sumado ayer le permitió al Atlético de Madrid lograr su mejor actuación en una primera rueda de Liga en toda su historia.
El hecho de que Messi y Neymar arrancaran el partido sentados en el banquillo hizo que Simeone cambiara su libreto respecto a la mayoría de encuentros contra rivales de jerarquía.
El Atlético disputó la primera mitad sin la presión asfixiante sobre el campo del Barcelona. La línea de mediocampistas se plantó unos metros delante del área y al Barcelona se le hizo imposiblepoder asociarse en el centro del ataque. Tiago y Gabi interrumpieron sin demasiados problemas la asociación entre Xavi Hernández, Andrés Iniesta y Cesc Fábregas y el Barcelona se convirtió en un equipo sin sorpresa, pese a su constante dominio
del balón. Las ocasiones de peligro fueron escasas: el Atlético amenazó en la primera mitad con una gran jugada personal de Arda Turan que finalizó con un despeje de Gerard Piqué delante de la línea de gol y un tiro de esquina que finalizó con un disparo apenas desviado de Diego
Costa, luego de que la pelota cruzara toda el área pequeña. El Barcelona, en tanto, complicó a Thibaut Courtois con un cabezazo de Pedro apenas desviado y un disparo lejano de Piqué.
La segunda mitad fue el escenario para que ambos equipos sacaran a flote sus mejores armas: el Atlético impuso su presión radical en el campo de su rival y Martino decidió sacar a escena nada menos que a Messi antes de lo que preveía, debido a la lesión de Iniesta.
El equipo local adquirió el protagonismo. Hizo que el Barcelona tuviera que recurrir a pases largos para salir desde su portería y anuló cualquier tipo trascendencia que tuviera Messi. El Barcelona, por su parte, tardó unos diez minutos en poder hacer pie. Una vez que lo logró, se obsesionó por bajarle el ritmo al partido a base de pases cortos horizontales.
En los últimos 15 minutos se produjeron una serie de jugadas de peligro que pudieron romper el 0-0 y terminar de torcer la historia a favor de uno de los dos equipos. Víctor Valdés atajó con mucho criterio una volea de Turan dentro del área y el Barcelona respondió con un disparo cruzado de Messi que Courtois tapó sobre su izquierda. Sin embargo, nadie pudo mover el resultado y ambos equipos seguirán empatados en la cima una semana más

* DPA.

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