Con la vuelta de Axel Kicillof de China, el Gobierno analizará esta semana la ecuación ingresos-egresos de dólares para destrabar el pago de importaciones, que estuvo bloqueado en los últimos tres días hábiles por orden del Banco Central.
La semana pasada, el titular de la autoridad monetaria, Alejandro Vanoli, explicó que la situación era estacional pero concedió que la falta de dólares para compras en el exterior estaba supeditada al ingreso de divisas. Mañana, el titular de la Cámara de Importadores, Diego Pérez Santisteban, volverá al Banco Central para reunirse con los técnicos y buscar una solución al parate. “Se generó una situación muy inconveniente”, aseguró el empresario.
Del otro lado, los exportadores cerealeros y aceiteros, los principales proveedores de dólares de la economía, entregaron a Kicillof y Vanoli una estimación de liquidaciones para el primer cuatrimestre. “No estamos esperando una nueva reunión. Nosotros cumplimos con la información”, señaló el vocero de Ciara-CEC, la entidad que nuclea a los exportadores cerealeros.
Con ese cronograma, el Gobierno definirá los egresos. En enero, según los últimos números de Ciara-CEC, se liquidaron US$ 1.086 millones. El año pasado, en el primer cuatrimestre, el sector aportó US$ 7.800 millones.
“Este año es diferente, la cosecha puede ser mejor pero el precio es menor. Que hayan entrado US$ 1.000 millones en enero es una buena señal. Se lo comentamos a Kicillof y Vanoli”, comentó el vocero de Ciara. El Gobierno, además, puede apuntar a la producción que no se vendió para exportar y que permanece en las silobolsas.
Los sectores productivos también esperan las definiciones sobre los dólares disponibles. La semana pasada, las automotrices se reunieron con el secretario de Comercio, Augusto Costa, pero no se habló del aumento del cupo de importaciones que algunos empresarios daban por hecho. Esta semana comenzarán a ser convocadas individualmente para negociar precios pero también cupos de importación.
Ayer, Costa señaló que la caída de las exportaciones del sector estaba vinculada al menor consumo de Brasil. “Se está trabajado mucho con Rusia, con China y otros países que puedan absorber parte de la producción”, explicó en declaraciones al programa Bestiario por Radio Cooperativa.
