El Gobierno logró una nueva actualización de tarifas de una empresa sin discusión en el Congreso

A través del silencio. Así parece trabajar el oficialismo para subir las tarifas en un contexto en el que el Congreso parece pintado. Es que la renegociación con la empresa de Transporte de Energía Eléctrica por Distribución Troncal de la Patagonia SA (Transpa) quedó hoy convertida en ley al cumplirse el plazo que tenía el Congreso para aprobarla o rechazarla.

De esa forma, como consecuencia del mecanismo conocido como sanción ficta, el acuerdo quedó automáticamente aprobado aunque nunca fue tratado por la Cámara de Diputados.  El contrato formaba parte de la sesión del miércoles pasado, pero los diputados pasaron a un cuarto intermedio antes de abordarlo, a diferencia del Senado donde el oficialismo logró su aprobación.

La renegociación implica un ajuste de las tarifas del 27 por ciento, que según el oficialismo tendrá un impacto del 4 por ciento en las distribuidoras y del 1,5 por ciento para los usuarios.

Transpa es una sociedad mixta, cuyo 51 por ciento pertenece a Trelpa, compuesta a su vez por Aluar y Camuzzi. El resto de las acciones son de los gobiernos de la Nación y Chubut.

La concesionaria inició sus actividades en junio de 1994 y su contrato de prestación es por 95 años. El principal comprador de la energía que transporta Transpa es uno de sus accionistas, Aluar, cuya planta de producción de aluminio se encuentra en Puerto Madryn.