La balanza comercial reunió sólo US$ 252 millones en abril, un 69% menos que el mismo mes del año anterior, con exportaciones que bajaron a US$ 5.231 millones, un 19% menos, mientras que la caída de las exportaciones fue del 12%, hasta los US$ 4.979 millones.
El desplome de las ventas al mundo se explicó “exclusivamente por precios”, según señala el informe del Indec, en una versión remozada donde los números abren paso a valoraciones e hipótesis.
Para remarcar la caída de precios, el Instituto a cargo de Norberto Itzcovich estima que si en abril “hubiesen prevalecido los precios del mismo mes del año anterior el saldo comercial habría arrojado un superávit de US$ 1.002 millones” y no los US$ 252 millones que arrojó. Bajo este supuesto el país perdió US$ 823 millones bajo los términos del intercambio.
Con más hipótesis nostálgicas en base a los precios del año pasado, el organismo de estadísticas agrega que “en el primer cuatrimestre de 2015 el saldo de la balanza comercial fue de US$ 420 millones. Si en este período se hubiesen registrado los mismos precios del primer cuatrimestre del 2014 el saldo comercial hubiese sido de US$ 1.449 millones”.
En los primeros cuatro meses del año, entró la mitad de dólares por la vía comercial que el año pasado: US$ 420 millones contra los US$ 975 de 2015, una cifra de todas formas baja en comparación con cuatrimestres anteriores.
En el cuatrimestre, el retaceo de las liquidaciones de soja y los precios internacionales impactaron en la baja de las exportaciones (-17%), mientras que las en las importaciones (-15%) las restricciones y la menor actividad industrial ayudaron a que la caída no fuese mayor.
Más allá de los cálculos hipotéticos del Indec, las exportaciones de productos industriales cayeron un 20% en abril aunque en ese caso los precios sólo cayeron 4% y el 16% restante se debió a una caída en cantidades.
