Estudios privados indican que existirían unos 500.000 pobres más que los que mide el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec), ocultamiento posible por la subvaluación del valor de la canasta básica, sobre la que se calcula el índice de pobreza.
La canasta básica estaría subvaluada en hasta un 20 por ciento, según estudios independientes, informa hoy el diario La Nación. La próxima medición oficial sobre el nivel de pobreza será dada a conocer el 20 de septiembre próximo y todo hace prever que el nuevo índice continuará con la tendencia decreciente que mostró hasta ahora, desde que Néstor Kirchner es presidente.
Sin embargo, analistas, organizaciones no gubernamentales, técnicos del Indec y hasta consultores cercanos al Gobierno advierten que aunque el nuevo índice de pobreza vuelva a bajar, habrá que desconfiar , porque estará subestimado.
Tomando el valor que el INDEC le asigna a la canasta básica alimentaria en el primer semestre de 2007 (7,6% más cara que en el segundo semestre de 2006), la pobreza habría bajado al 24,3% y la indigencia, al 7,9%, según un estudio realizado por SEL Consultores.
Pero, según una medición propia de la canasta básica (un 11,5% más cara que el año pasado) de esa misma consultora la pobreza sería del 26% y la indigencia, del 8,4%: unos 450.000 pobres más que los estimados por el INDEC en base a la canasta oficial.
El estudio sostiene que si la canasta hubiera aumentado un 15% en la primera mitad del año –estimación sostenida por algunos analistas- la pobreza habría crecido aún más, y habría 700.000 pobres.
El analista Artemio López, uno de los más consultados por el Gobierno, estima que cada punto de inflación ubica a 150.000 personas más bajo la línea de la pobreza. Si el INDEC esconde cuatro puntos de inflación, entonces para el Gobierno hay 600.000 pobres menos.