Con el dólar “planchado” y las expectativas de una devaluación con el cambio de Gobierno, las compras de pasajes al exterior reviven entre los que buscan “asegurarse” un dólar a 9 pesos. Así, las reservas trepan hasta 30% respecto de 2014, que si bien fue un año magro para comparar, muestra cómo juega la expectativa por un salto cambiario.
Así lo reconocieron los representantes de las agencias de viaje que se reunieron esta semana en un congreso en Mendoza, donde señalaron además que esta mayor avidez por los viajes al exterior hizo que mejoraran las expectativas del sector para este año, después de un 2014 que sufrió el impacto de la devaluación.
“Entre marzo de 2014 y abril de 2015 el peso se devaluó sólo 10%”, detalló para explicar el repunte de los viajes al exterior el economista Pablo Singerman, director del Observatorio de Estadísticas de Agencias (OEA-Tur). En ese mismo período, los costos internos crecieron 31%.
La salida de argentinos en marzo, por su parte, creció 10% según los últimos datos del Indec en comparación con el mismo mes del año anterior, cuando todavía estaba fresca la devaluación de enero de 2014. Según Singerman, el impacto psicológico de una devaluación dura de tres a cuatro meses. Por eso empieza a verse también una incipiente recuperación de visitantes brasileños. El real se devaluó 20% este año, y ahora da señales de haberse estabilizado.
Así, el turismo emisivo todavía no descorcha pero da muestras de repunte de la mano en muchos casos de paquetes tradicionales a los grandes centros turísticos. “Los viajes de 15 años siguen fuertes”, explicó una agente de viajes de Bahía Blanca que vende estos paquetes para grupos de amigas. “No es sólo Disney: también playas del Caribe y cruceros entre Buenos Aires y Brasil”, detalló sobre la oferta que se expande para el segmento de viajes para los más chicos. Los datos del OEA-Tur también muestran que, para fines de semana largo, Brasil y el Caribe se vuelven habituales.
