En dos semanas, Sebastián Eskenazi y otros ejecutivos de YPF, la principal petrolera de la Argentina, además de propietarios de estaciones de servicio, consultores del sector energético, entre otros, comenzarán a ser llamados por la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia (CNDC) que depende del secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, para declarar en un expediente en el que se investiga a la empresa por posible abuso de posición dominante en el mercado de venta de combustibles.
Formalmente, la denuncia presentada por la Federación de Entidades de Combustibles de la Provincia de Buenos Aires afirma que YPF discrimina a las estaciones de servicios independientes a través de precios y ritmo de abastecimiento, por los que la empresa priviligiaría a las estaciones de su propia marca por sobre el resto.