La
Federación de Trabajadores petroleros y del Gas Privados (FASPYGP) decretó hoy el
estado de alerta y movilización en todo el país, en
demanda de una urgente recomposición salarial.
El secretario gremial de la FASPYGP,
Alberto Roberti, anunció a la agencia oficial
Télam que
"ante la negativa empresaria a sentarse a discutir salarios, no quedó más remedio que
disponer el estado de alerta entre los afiliados".
Roberti dijo que "reclamamos una
recomposición salarial del orden del 30 por ciento y si no somos escuchados, a la
brevedad convocaremos a medidas de fuerza".
El dirigente petrolero pidió comprensión al conjunto de la sociedad ante las decisiones que
tome en el futuro el gremio, al asegurar que "la falta de diálogo puede generar
medidas de fuerza que afectarán el normal abastecimiento en la provisión de gas".
La organización gremial generó un difundido conflicto durante noviembre del año pasado,
cuando
realizaron paros porque los trabajadores petroleros vieron afectados sus ingresos
salariales por tributar el impuesto a las ganancias".
Tras una serie de medidas de fuerza lograron una ley nacional específica para los
trabajadores de la actividad petrolera, que los eximió de pagar ganancias en los rubros adicionales
a los salarios, como por ejemplo las horas extras, vales de comida y otros items.