ECONOMIA
perdidas de eficiencias y cepo exportador

Reclamos en cadena por la intervención

Los sectores del trigo, soja, maíz, sorgo y girasol plantean un alerta sobre la sustentabilidad productiva debido a la política oficial en la comercialización de granos. Campañas dudosas.

Inversion. En los 90 se sembraban dos hectáreas de soja por cada una de maíz. Hoy, son 4,5.
| Cedoc Perfil

Las cuatro asociaciones por cadena de producto (Acsoja, Argentrigo, Asagir y Maizar) consensuaron una serie de temas que consideran prioritarios “con la premisa de que, si se fortalece el producto, luego se beneficia toda la cadena de valor y, por ende, al país”. Por ello, sus representantes mantuvieron un encuentro con  el ministro de Asuntos Agrarios bonaerense, Alejandro Rodríguez. Participaron el vicepresidente de la Asociación de la Cadena de la Soja (Acsoja), Luis Zubizarreta, el presidente de la Asociación Argentina de Trigo (Argentrigo), Matías Ferreccio, el presidente de la Asociación Argentina de Girasol (Asagir), Luis Arias, y el vicepresidente de la Asociación de Maíz y Sorgo Argentinos (Maizar), Alberto Morelli.
“Las distorsiones que afectan la comercialización de nuestros productos, derivadas de las intervenciones del Gobierno en el sector; las diversas y variadas regulaciones que afectan al desarrollo y la expansión de la agricultura en ambientes adversos o de alta vulnerabilidad para la producción; y la total falta de respuesta a reclamos o sugerencias sobre asuntos que afectan a las cadenas nos ubican en un estado de gran preocupación”, expresaron los representantes de las cadenas.
Puntualmente, una de las grandes preocupaciones es el impacto creciente en la pérdida de sustentabilidad productiva por la falta de rotación de cultivos que ha ocasionado la serie de distorsiones al mercado de granos y oleaginosas. Un ejemplo que muestra el vuelco productivo hacia el monocultivo es la relación del área sembrada entre los cultivos de soja y maíz. En los años 90 y principios de 2000, se sembraban dos hectáreas de soja por cada hectárea de maíz. Hoy, se siembran 4,5 hectáreas de soja por cada hectárea de maíz, estancando la producción de éste y dejando de aprovechar una demanda internacional vigorosa. Además, su ausencia en la rotación genera prejuicios agronómicos que se traducen en menos rendimientos para la soja, por ejemplo.
Entre los temas más importantes que se plantearon ante el ministro bonaerense, se destacan la reivindicación de la libertad de los mercados, la eliminación de los Registros de Operaciones de Exportación (ROE), la reducción de la excesiva presión impositiva a los productores, la eliminación de las retenciones para todos los cultivos, y la consolidación de un mercado a término fuerte. De la reunión, surgió el compromiso de trabajar en una agenda que aborde no sólo los temas de política nacional, que escapan de las competencias provinciales, sino también otros puntuales de jurisdicción bonaerense que fueron tratados en el encuentro.
Entre ellos, se destaca la operatoria del puerto Quequén, donde el ministro Rodríguez expresó que se han realizado cambios en los últimos tres meses, los temas de infraestructura vinculados al Plan Maestro de la Cuenca del Salado y el estado de rutas provinciales. Además, se mencionó la falta de seguridad rural y la imperiosa necesidad de evitar piquetes y amenazas realizadas fuera de la ley y con reclamos improcedentes y contrarios a la libertad de contratación de transporte. Por último, se analizó el tema de las regulaciones.