Invitados a escena en comida para recaudar fondos. Para algunos de quienes participaron de la cena anual de la Fundación Amigos del Teatro San Martín quizás la información pasó desapercibida. No así para algunos empresarios del espectáculo como Carlos Rottemberg y varios artistas presentes. Y fue el anuncio que desde el “escenario montado sobre el escenario” corrió por cuenta “y responsabilidad” de Jorge Telerman: el inicio de las obras que permitirán que el teatro Presidente Alvear –que integra el Complejo Teatral de la Ciudad– reabra sus reabra sus puertas. El mismo está cerrado y olvidado desde 2014. Quizás ese dato fue la noticia más significativa de la cena en cuestión donde, además, la fundación dueña de casa exhibió videos muy didácticos, sobre lo que vienen haciendo con lo recaudado en comidas como éstas y con el aporte de sponsors de todo tipo. Enrique Avogadro también tuvo su momento en ese escenario circular donde reveló que fue en las tablas del Teatro San Martín donde –él como espectador– conoció a su esposa. Y si algo destacaron los presentes fue la sensación mágica que tuvo la cena al realizarse sobre el escenario mismo de la sala Martín Coronado, la más grande del menciondo teatro.
Agnóstico tozudo. Federico Alvarez Castillo es agnóstico, pero en el amplio jardín de su casa del Country Tortugas hay emplazada una figura de la virgen María que colocó su pareja, la ex modelo Lara Bernasconi. El último fin de semana, Iñaki, el pequeño hijo de la pareja sufrió un accidente casero al caer de una altura considerable sin sufrir más daño que un raspón y magullón. Ese “milagro” no logró quebrar el agnosticismo del conocido empresario, pero sí lo movió a hacer una ofrenda floral a la virgen de su jardín.
Arte argento en NYC. Otra vez hay piezas de arte argentino que cotizarán en la subasta que Christie’s organizó en Nueva York para fin de noviembre. De los 22 lotes nacionales exhibidos, una estructura de alambre de acero (obra sin título y del año 1979) de León Ferrari sale con base de US$ 120 mil. Le siguen obras de Kuitca y de Seguí en US$ 80 mil cada una.
Tres días de fiesta. Hubo estados alterados y alta volatilidad en llamados de WhatsApp entre Buenos Aires y Villa La Angostura, en especial durante el jueves. Es que ese mismo día comenzaba el primero de los tres días de celebraciones de la boda de Sabrina Sielecki y Ariel Behar. El epicentro del casamiento era Las Balsas, el hotel relais chateau que los Sielecki tienen a orillas del Nahuel Huapi. Esta boda tendrá como anécdotas ausencias sufridas por la demora en los vuelos de Aerolíneas Argentinas y las ausencias (o fugas con aviso) de los invitados fans de Boca que el sábado dejaron asientos vacíos para ocupar otros en la Bombonera.
El aporte del tío. No duró tres días, fue más bien un casamiento discreto, algo numeroso y muy familiar. Y fue el de Delfina, una de las hijas de Andrea Grobocopatel y Walter Torchio, político e intendente del “reino de los Grobo”, Carlos Casares. Fue una boda de día y con la mayoría de los invitados vestidos de blanco o pastel, padre de la novia incluido. Una de las sorpresas la dio el famoso tío de la novia, Gustavo Grobocopatel, cuya nueva pareja –soprano ella– cantó durante la celebración.
Confirmación. No fue programado sino que, ante tanta demanda de chicos para confirmarse en la Iglesia del Pilar, se los distribuyó en dos domingos consecutivos. En el que pasó, se confirmó Valentina Barbier, la hija de Juliana Awada y su ex pareja belga. Y este domingo por la tarde quizá sea Horacio Rodríguez Larreta quien participe de la segunda tanda de confirmaciones allí. Y es que Antonio y Rafael –los hijos que tuvo su padre con su segunda mujer– serán quienes se confirmen.