Es un disco variado, con temas que hablan sobre todo de los asuntos del amor. Si tuviera que elegir una palabra para definirlo, diría que es luminoso. Tiene algunas canciones que hablan de la tristeza, pero hay algo esperanzador que lo atraviesa y que me gusta mucho”, dice Julieta Venegas de Algo sucede, el álbum que editó el año pasado y que será el núcleo central de sus próximos shows en la Argentina: el 29 de septiembre en Plaza de la Música (Córdoba), y el 1º de octubre en el Gran Rex. “Pero habrá canciones de todos los discos. La presentación de Algo sucede es una excusa para el reencuentro con el público argentino, tan apasionado, divertido, un poco loco... Es gente muy receptiva, que pide las canciones más conocidas pero también escucha con atención las nuevas”, aclara la mexicana, que ya ha recorrido con este tour Estados Unidos y algunos países de Europa, al margen de su propia tierra. La gira terminará el próximo 10 de diciembre en el Teatro de Verano Ramón Collazo de Montevideo.
El tercer corte de Algo sucede, un disco que ha recibido numerosos elogios de la prensa internacional, es Todo está aquí, en cuyo videoclip, dirigido por la dupla creativa Recreo (Oscar Fernández Roho y Juan Pablo González Cabrera), participa la actriz argentina Calu Rivero: “No la conocía, fue una idea de Oscar y Juan Pablo –cuenta Venegas–. De hecho, no estaba planificado hacer ese clip. Yo estaba en Buenos Aires de vacaciones y Oscar me propuso aprovechar para hacerlo muy rápido. Quedó muy bien. Calu conectó muy bien con la canción y fue muy generosa”. En el disco hay otro argentino involucrado, el productor Cachorro López, un socio habitual de Julieta que esta vez trabajó en dupla con su colega mexicano Yamil Rezc. Y participa como invitado un prestigioso artista brasileño, el chelista Jaques Morelenbaum, un favorito de Caetano Veloso. “Es un gran honor que Jaques haya tocado en dos temas del disco –remarca ella–. Ya habíamos trabajado juntos en el unplugged que grabé para MTV y me hice muy fan de él”.
A los 45 años, exitosa y repetidamente premiada, Venegas sueña con componer bandas sonoras instrumentales para cine. “Acabo de aportar una canción para una película –cuenta, en referencia a un track que grabó con Yamil Rezc para La vida inmoral de la pareja ideal, film de su compatriota Manolo Caro, al que muchos asocian en México con Pedro Almodóvar–. Pero mi deseo es trabajar en todo el score, componiendo más que nada temas instrumentales. Soy pianista, ya hice música para teatro hace unos años y ahora quiero sumarme de nuevo a la visión de alguien, trabajar codo a codo con un cineasta. Sería muy enriquecedor para mí”.
Nombrada embajadora de la buena voluntad por Unicef en México y embajadora cultural de buena voluntad por el Consejo de Ministras de las Mujeres de Centroamérica (Commca), Julieta Venegas suele involucrarse en temas políticos y opinar sobre la actualidad de su país. Hace unas semanas declaró que México “sigue siendo un país increíble, con muchísimas cualidades, pero que ahora está metido en un problemón”. Consultada por Perfil sobre el asunto, amplió su diagnóstico: “Hay cosas que están muy feas en México, más allá de que se han calmado un poco los problemas en zonas fronterizas como Ciudad Juárez y Tijuana –el lugar donde Venegas, nacida en Long Beach, Estados Unidos, pasó buena parte de su infancia y adolescencia–. Es un problema estructural: es un país muy grande que ha sufrido un grado muy alto de corrupción e impunidad durante demasiado tiempo. Mueren muchos jóvenes cada año y nadie explica por qué está pasando eso. Hay algo que falla, notoriamente. Es complejo vivir en México hoy”.
Sobre las provocativas declaraciones de Donald Trump, el polémico candidato republicano a la presidencia de Estados Unidos, que propuso construir un muro impenetrable entre su país y el de Venegas, la cantante sostiene que “justamente, conviene no quedarse en la provocación e intentar ir un poco más allá”. Para ella, el objetivo de Trump es básicamente generar una reacción: “Al margen de una declaración explosiva, lo importante, y lo penoso, es saber que él representa a muchos que piensan así en un país donde viven tantos latinos. Trump expresa un odio a otras razas y otros países con el que mucha gente se identifica en los Estados Unidos. En México muchos se toman todo esto en broma, pero yo creo que es mejor tomárselo en serio. La gente que lo sigue también va muy en serio, hay que entenderlo. Esta idea de separar a la gente, de discriminar, es realmente muy peligrosa”.