El coronavirus es el “tema médico” del año, al menos si lo medimos por su trascendencia mediática, la preocupación pública que en algunos casos se aproxima al pánico y las muchas medidas implementadas para su prevención, algunas con buen fundamento científico y otras un tanto “caseras”. Su trascendencia aumentó por la “cuarentena" dispuesta por el gobierno que paralizó la actividad económica, al principio en forma casi total, solo se eximieron a los servicios públicos esenciales vinculados a la salud, los demás sufren importantes restricciones.
Este aspecto por si solo, tiene importantes consecuencias para la economía general: ya sabemos que tendremos otro año más de disminución del PBI, que se sumará al de los anteriores que tenía otras causas, pero se iguala en sus resultados: la economía nacional sigue en baja. Me atrevo a afirmar que ya es mucho y que sufriremos sus consecuencias por varios años. Varias empresas extranjeras de facturación importante, seis lo anunciaron ayer pero es sabido que varias más están a punto de hacerlo.
Las pymes, no publican su cierre, por lo que es más difícil estimarlos pero basta con ver la gran cantidad de negocios cerrados, al principio por unos días, pero la persistencia de las cortinas bajas y ver que muchos comercios están siendo desmantelados nos indica que dejaron de existir.222
El decreto no modifica específicamente el régimen de las licencias especiales de la ley de contrato de trabajo, que sigue siendo la norma básica pero, al crear múltiples prohibiciones de funcionamiento de empresas crea un estado de licencia de hecho ya que ningún empleado puede trabajar contra la voluntad del empleador.
No aclara si se abonarán las remuneraciones o en que porcentaje, tema que deberá ser resuelto por el estado o dejándolo como tema a ser resuelto mediante negociación con el sindicato de la actividad, claro augurio de conflictos futuros. La medida de prevención que establece es el “aislamiento social, preventivo y obligatorio y el “distanciamiento” igualmente preventivo y obligatorio, No establece que será necesario presentar síntomas ni pertenecer a grupos de riesgo para que el trabajador goce de la licencia, lo que de todas maneras se deducía del carácter general de la medida.
Establece los requisitos que deben concurrir para que una zona sea declarada de “distanciamiento social, preventivo y obligatorio”. Algunos un tanto absurdos, por ejemplo que “El sistema de salud debe contar con capacidad suficiente y adecuada para dar respuesta a la demanda sanitaria”.
Nos preguntamos que ocurrirá en aquellos que haya cantidad de contagiados y se verifique la circulación activa del virus pero no tengan un sistema de salud adecuado para dar respuesta a la demanda. Atribuimos esta imperfección al apuro con que son dictadas las medidas en un estado de emergencia, pero augura que deberán dictarse una buena cantidad de normas que la complementen.
Lo que realmente resulta trascendente es que estamos en una emergencia sanitaria y todos debemos contribuir a que sea lo menos dañina posible
