Hay novedades en Honduras.Hay alejamiento entre las partes y ciertas variables intrínsecas del acuerdo conformado entre los equipos de Zelaya y Micheletti se ven ahora amenazadas por ciertas “chicanas” que estarían llevando dicho entendimiento al fracaso.
El presidente de facto Roberto Micheletti ha anunciado por la noche del jueves a través de sus voceros que seguirá presidiendo Honduras hasta las elecciones del 29 de Noviembre. Lo único que se ha confirmado es la intención de “cambiar” el gabinete presidencial, integrándolo en conjunto con varias fuerzas políticas. Al fin de la noche se esperaba que Zelaya envíe a los delegados para integrar el mismo, pero es evidente que Zelaya esperaba presidirlo como presidente repuesto en su cargo. El gabinete actual de Micheletti ha renunciado justamente abriendo paso a que se integre un nuevo equipo ministerial.
"Siendo que don Roberto Micheletti es el presidente constitucional de la República le correspondería liderar ese gabinete a él", explicó a la prensa el secretario de gobierno Pineda Ponce, vocero del gobierno de Micheletti.
Al ser cuestionado por la prensa sobre la razón por la cual el presidente constitucional, Manuel Zelaya, no integraría el nuevo gobierno, Ponce respondió que no estaba pensado que Zelaya asuma inmediatamente y que el acuerdo no “contenía” esa específica cláusula.
El Congreso -según dijo el funcionario de facto-, es el organismo que debe definir la “reasunción de Zelaya”. Pero, pese a todo, aun dicho organismo no se reuniría a tratar el tema debido a que una Comisión interna ha sugerido que se resuelva después de las elecciones y que debe opinar además la Corte Suprema.
Zelaya, por su parte, dijo que a la medianoche del jueves vencía el plazo para ser restituido. Afirmó el acuerdo se cae sino lo restituyen y según declaraciones a la cadena Telesur afirmó desde la Embajada del Brasil: “resulta que ahora hablan de cambio de gabinete, y no de la reposición del Presidente, que es la persona que debe presidir dicho gabinete”.
Si esta situación se mantiene bajo lo que el presidente de facto Micheletti afirma, a Zelaya no le permitirían volver aun al poder y se estaría intentando llegar a las elecciones sin su presencia en el gobierno, esperando pronto tener un nuevo líder electo. Tampoco es clara la posición de la “comisión de verificación del acuerdo” (la integra el ex presidente chileno Ricardo Lagos, la actual Secretaria de trabajo de EE.UU. Hilda Solís y dos hondureños), si es que el mismo parecería malograrse al no ser Zelaya repuesto.
Si bien el Secretario y delegado estadounidense para la región hemisférica, Tom Shannon, ha dicho a distintos medios que Estados Unidos condena al golpe y sigue pidiendo la restitución de Zelaya, su gobierno estima que no se debe suspender el proceso electoral. Aunque es de notar que Estados Unidos ha últimamente enviado mensajes ambivalentes en lo que a la “aceptación” del nuevo presidente elegido en Noviembre se refiere si Mel Zelaya no reasume prontamente.
Por la noche el grupo de Río reunido en Jamaica volvió a exigir que Zelaya sea repuesto en su cargo inmediatamente para “validar” el proceso electoral y aceptar a las autoridades electas en él
(*) Especial para Perfil.com.