La presidenta de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto, mantuvo este miércoles un breve encuentro con el papa Francisco luego de una audiencia general en el Vaticano y le entregó una carta en la que le pidió que interceda en la búsqueda de los desaparecidos durante la última dictadura.
El Sumo Pontífice se acercó a Carlotto luego de brindar una audiencia general en la plaza de San Pedro ante cien mil personas y la saludó en forma afectuosa, según consigna el portal de Abuelas de Plaza de Mayo.
"En este sentido, solicitamos a Usted, que pida a los miembros de la Iglesia Católica y a sus feligreses que brinden la información que tengan sobre el paradero de nuestros nietos y nietas desaparecidos", señala la carta entregada por Carlotto, quien estuvo acompañada por Buscarita Roa, integrante de Abuelas, y el hijo de desaparecidos y legislador porteño del Frente para la Victoria, Juan Cabandié.
Antes de ser recibida por Francisco, Carlotto había anticipado: "Voy a darle por primera vez la mano a Bergoglio ahora Francisco, con emoción por supuesto, con el orgullo de que sea un argentino y con la esperanza de que nos ayude. Ahora es muy importante, tiene más poder y posibilidades de hablar por primera vez de nuestros desaparecidos y de nuestros nietos que estamos buscando, que no queremos morir sin abrazarlos".
Carlotto sostuvo que la Iglesia argentina "sabe" lo que pasó durante la última dictadura y consideró que papa Francisco "ahora tiene el poder para pedirles que nos digan lo que saben y es la forma más concreta de saber también dónde están los nietos que fueron robados". "Que nos ayude a encontrarlos a través de la Iglesia en Argentina, reclamó en declaraciones por Radio Del Plata.
Carlotto buscó dejar atrás declaraciones previas en las que aseguró que el ex cardenal argentino pertenece a la "Iglesia que oscureció al país" y que debía hacer un "mea culpa" porque hay "acusaciones muy serias" contra él por su actuación "durante la dictadura cívico-militar".
La dirigente de derechos humanos fue acompañada por Buscarita Roa, otra de las abuelas, y el legislador porteño Juan Cabandié, hijo de desaparecidos.