La demócrata Hillary Clinton y el republicano Donald Trump realizan este lunes el último esfuerzo para mantener vivas sus aspiraciones de llegar a la Casa Blanca, en el capítulo final de una campaña histórica en Estados Unidos. Después de algo más de un año de marchas y contramarchas, dramas inesperados y una serie sin precedentes de escándalos de todo tipo, para la exsecretaria de Estado y el polémico millonario llegó el momento de poner todas las cartas sobre la mesa.
El sábado, los demócratas lanzaron un video en el que cuentan su propia versión de la historia de la campaña al mejor estilo House of Cards. Allí, se muestran imágenes del "detrás de escena" con el que se buscan mostrar una Hillary Clinton más íntima. Asimismo, lanza duros golpes contra Trump y su particular estilo personal. El objetivo es capturar los votos independientes y amplicar la brecha con el republicano.
El último capítulo de la larga serie de giros en la historia de esta campaña se conoció el domingo cuando el FBI informó que no pretendía presentar cargos contra Clinton por el interminable escándalo por sus correos electrónicos cuando era Secretaria de Estado. "Estamos felices de saber que este asunto ha quedado resuelto", dijo Jeniffer Palmieri, responsable de comunicaciones de la campaña de Clinton, poco después de conocerse la noticia. Ese anuncio había caído literalmente como una bomba sobre la campaña de Clinton, ya que obligó a la candidata a pasar varios días dando explicaciones sobre un escándalo que parecía cosa del pasado.
De momento, para este lunes, Clinton tiene previsto un gran cierre de campaña. En una de sus paradas tendrá la colaboración de los rockeros Bruce Springteen y Bon Jovi, aunque en la noche jugará su carta más fuerte, cuando ponga en el escenario a su esposo, el expresidente Bill Clinton, acompañado por el actual mandatario, Barack Obama y su esposa Michelle.
Por su parte, Trump también mantuvo una agenda frenética que incluyó un largo discurso en Minnesota en el que arremetió contra la clase política en general, y alegó que Clinton enfrentaría "investigaciones por mucho, mucho tiempo".
Sondeos. Las últimas cifras mostraron a Clinton por delante de Trump con una ventaja mínima. Un sondeo realizado por la red NBC y el diario Wall Street Journal, divulgado el domingo, atribuyó a Clinton una ventaja de cuatro puntos porcentuales a nivel nacional, por 44% a 40%, en una encuesta que incluye a los otros dos candidatos minoritarios en la disputa.
El experto en sondeos Nate Silver, del sitio web especializado FiveThirtyEight, señaló que "si tú tienes solamente el 44% del voto, eso significa que de alguna forma estás vulnerable en la mayoría de las regiones que aún están indefinidas". En conclusión, añadió, a apenas dos días de la campaña "uno preferiría estar en los zapatos de Clinton que en los de Trump, pero no es una posición extraordinariamente segura".