Uno de los secretos mejor guardados del rey de España salió a la luz. La finca del palacio de La Zarzuela (Madrid) alberga un pabellón de caza que costó 3,4 millones de euros a los ciudadanos españoles. Además, un blog reveló que el monarca cazaba elefantes con un lujoso rifle con decoraciones de oro y cristales Swaroski.
El pabellón, donde Juan Carlos de Borbón exhibe sus trofeos de caza, cuenta con 1.700 metros cuadrados divididos en dos pisos, en las que hay desde dormitorios hasta una sala acorazada de 200 metros cuadrados en la que el rey guarda las armas. Según la prensa española, los techos son lo suficientemente altos para poder albergar trofeos de gran tamaño como elefantes y jirafas.
El rey tenía todos estos objetos diseminados entre las fincas de patrimonio y casas de sus amigos, pero el Patrimonio Nacional, el ente estatal que se encarga del mantenimiento de residencias oficiales, entre otras cosas, decidió en 2007 desembolsar 1.800 euros por metro cuadrado para la construcción de este “museo” privado dentro de los campos que rodean el Palacio de La Zarzuela.
Un portavoz de la Casa Real informó que esta obra pasó por la supervisión de la Intervención General del Estado, y explicó que prácticamente todas las casas reales europeas cuentan con su propio pabellón de caza, ya que este deporte fue y es una práctica muy común entre la realeza y la aristocracia.
Patrimonio Nacional administra el patrimonio histórico-artístico del Estado español y es responsable de los bienes de la Corona, y que incluyen ocho palacios, 22.000 hectáreas de bosques ricos en fauna, además de 13 monasterios y conventos que albergan más de 153.000 obras de arte, según informa la agencia Europa Press.
Por otra parte, un blog del diario republicano “Público” informa qué tipo de armas se encuentra en este pabellón y destacaba un rifle de caza “con el escudo de la corona española y profusamente decorado con incrustaciones de oro de 24 quilates, platino y la mira telescópica fabricada por la casa Swarovski”.
Se trata de rifle hecho artesanalmente por John Bolliger, el fundador de Mountain Riflery, Inc, empresa que desde 1966 se dedica a la creación de armas personalizadas, y encargado especialmente para que el rey Juan Carlos lo llevara a la infame cacería de Botswana de abril de 2012, cuando saltaron a la luz pública sus excéntricas aventuras africanas con una presunta amante y otros empresarios.
El precio de este modelo puede fácilmente llegar a los 20.000 euros. A esa cifra habría que sumar el presupuesto del famoso maestro grabador estadounidense Mike Dubber, que se encargó de la ostentosa decoración donde destaca el Sello Real de la Casa Española, en oro de 24 quilates y platino.
La pasión del rey Juan Carlos por la caza provocó una grave crisis de imagen para la Monarquía al darse a conocer que el monarca practicaba esta “distracción” -en África, cada safari de caza puede costar hasta 20.000 euros- mientras España se encuentra sumergida en una crisis económica histórica.
De hecho, su viaje de caza a Botswana debía mantenerse en el más absoluto secreto si el rey no se hubiera quebrado la cadera al caerse, hecho que caldeó aún más el ánimo de los españoles. Por otra parte, miles de personas instaron al rey de España dejar de ser presidente de Honor de WWF, la famosa organización de protección a los animales.