Grecia eludió este miércoles una quiebra que habría afectado a los mercados globales y amenazaba el futuro del euro cuando sus legisladores apoyaron las polémicas medidas de austeridad en medio de violentas protestas. Legisladores e inversionistas aplaudieron las medidas que tienen por objeto recortar el gasto, aumentar los impuestos en 40.000 millones de dólares y recaudar 71.000 millones de dólares en privatizaciones durante los próximos cinco años.
Más de 100 personas resultaron heridas en los disturbios. En medio de una nube de gas lacrimógeno, los manifestantes lanzaron todo lo que podían encontrar contra la policía antidisturbios y trataron de bloquear el edificio del Parlamento. La Policía antidisturbios disparó salvas de gases lacrimógenos para hacer retroceder a los manifestantes, que agredían a los agentes con botellas y basura, y volcaban barreras.
Como protesta apareció un globo que rezaba, "Ayer Argentina, hoy Grecia, Mañana"?
