A contramano de lo que muchos en la superficie piensan, cada uno de los 33 mineros que serán rescatados en cuestión de horas pidieron salir último. Sin embargo, el ministro de Salud, Jaime Mañalich, les informó ayer, vía videoconferencia, que serán sacados a la superficie por un orden definido por razones técnicas. El último en hacerlo será Luis Urzúa, quien fue, durante todo el encierro, el líder del grupo.
Urzúa fue quien lideró la situación desde que quedaron atrapados y debió incluso soportar una pequeña revuelta en su contra. "Al final saldrá el jefe, el trabajador de mayor jerarquía. Como en los barcos, el capitán es el último en salir", dijeron los encargados del operativo.
Antes de él, los rescatados serán Pedro Cortez y Ariel Ticona, parte del grupo de los "hábiles". El rol de estos dos será clave, ya que tendrán que supervisar las redes de comunicaciones con la superficie durante el ascenso de sus compañeros. Además, José Ojeda, que sufre de diabetes; Jorge Galleguillos, que es hipertenso, y Mario Gómez, aquejado de silicosis, serán rescatados luego de los primeros cinco. Estos son parte del grupo de los "débiles". Otros más admitieron el miedo a salir a través de la cápsula.
Todos afuera. Según los datos que surgen desde el pie de la mina, los trabajadores habrían hecho un sorteo hace algunos días para resolver el orden de ascenso. Y aunque hicieron llegar sus propuestas a los rescatistas, no tendrá demasiado peso en la lista final.
Entre los primeros cinco rescatados (el grupo de "los hábiles") está decidido que se encontrará el trabajador boliviano Carlos Mamani. Afuera lo esperará el presidente de Bolivia, Evo Morales, junto con su par chileno Sebastián Piñera.