En una silenciosa Florida, la puerta argentina hacia el "sueño americano" también se está cerrando con el mismo cerrojo que pretende bloquear el paso sur a través de Arizona al grueso de los inmigrantes mexicanos y centroamericanos. Una idea del fiscal general del Estado, Bill MacCollum, de impulsar una normativa aún más dura que la del Estado sureño a la caza de votos para su candidatura republicana a la gobernación en noviembre, despertó la preocupación y el enojo en la comunidad argentina local.
Por la gran afluencia de latinos, las tierras del Sol se convirtieron no sólo en una opción privilegiada de playa en épocas del 1 a 1, pero también en la ruta que muchos argentinos escogieron hacia un futuro promisorio lejos de casa. Algunos aprovecharon la política de no visado de los 90 para hacer pie en la Florida en busca de trabajo. Otros se sumaron después de la crisis de 2001. Y hoy, un nuevo flujo migratorio sigue el mismo sendero con visas de turistas para permenecer en Estados Unidos, una vez vencidas.