Matías Morla, abogado representante de las hijas de Roberto Fernández Montes, el empresario español asesinado en su departamento de Caballito, sostuvo hoy que "no cabe duda" de la culpabilidad de los dos detenidos y apuntó a la responsabilidad de una tercer persona. Además remarcó: "El crimen fue planificado".
La policía, en tanto, libró un pedido de captura nacional e internacional contra un carnicero paraguayo llamado Pablo Ramón Fernández Torres, de 51 años, quien está prófugo. Morla señaló que de la casa de la víctima faltaban veinte mil dólares que aparecieron "en la rueda de auxilio de Corona". De este modo, precisó que ambos aprehendidos contaron "con el apoyo de un tercero" para cometer el hecho. "Si no funcionaban las cámaras de seguridad, este seria un crimen impune", concluyó.
"No hay duda de que el crimen fue planificado, estaba previsto", sentenció el letrado, quien a su vez detalló que "el cuerpo del hombre apareció en una condición lamentable".
"Con las cámaras (de seguridad) del departamento, no cabe duda que son los asesinos. Tampoco cabe duda de lo imbéciles que son por cómo actuaron: usando guantes de látex se olvidaron de que había una cámara de seguridad filmando", expresó el defensor en declaraciones a la señal de noticias TN.