Declaró Arce, que pasó de sospechoso a procesado

Ya en calidad de procesado y no como sospechoso, José Arce (el viudo de Rosana Galliano) declaró ayer durante más de siete horas ante la Justicia. Volvió a sostener que es inocente de las acusaciones que lo señalan como quién dio la orden para el asesinato de Galliano, y al retirarse aseguró que se iba "tranquilo" y que no tenía miedo de quedar preso. "Jamás temí ni temeré quedar detenido. La verdad prevalecerá. La familia de Rosana siempre ha apuntado mal, pero es problema de ellos", dijo.

Arce aseguró además que no tiene "nada que ver" con el crimen y añadió: "necesito saber y que se haga justicia frente a quién masacró a mi esposa y dejó a mis hijos sin madre".

El fiscal de Zárate-Campana Marcelo Pernici, a cargo de la causa, apuntó principalmente su interrogatorio a la llamada que recibió la victima en su celular, a raíz de la cual debió salir al exterior de la vivienda donde la atacaron a balazos. Y también lo consultó sobre pistas, datos y rumores, entre ellos los que indicaban que el marido habría estado averiguando por supuestos "killers" para mandar a matar a Rosana.

Arce respondió las preguntas del fiscal Pernici, pero minimizó la cuestión al señalar: "Soy el marido y querían que declarara".
El abogado Ramiro Rúa, defensor de Arce, sostuvo que "evidentemente la situación procesal" de su cliente "ya no es la misma porque fue llamado a indagatoria", y vaticinó que "seguramente" habrá una próxima citación, cuando se hayan despejado dudas y cotejado respuestas dadas hoy en la exposición.

Empero, Rúa remarcó que "no hay riesgo de detención porque no hay responsabilidad penal" para su cliente. Rosana Galliano, una ex modelo de 29 años, y José Arce, de 59, se casaron y tuvieron dos hijos, pero desde 2006 vivían un conflictivo proceso de divorcio donde la joven lo denunció por maltratos y logró echarlo de la casa. El 16 de enero de 2008 la mujer estaba con su hermana, y los chicos al cuidado de su padre, cuando recibió un llamado a su teléfono celular; como en la casa del barrio El Remanso, en Exaltación de la Cruz, no había señal, tuvo que salir al jardín, oportunidad en la que una persona le disparó a mansalva tres balazos que la mataron.

El viudo siempre fue el principal sospechoso para la familia de Rosana, pero el fiscal Pernici recién lo llamó a indagatoria ahora, luego de cumplirse el primer aniversario del homicidio. Acompañado por sus abogados, Arce llegó a la Fiscalía y le dijo a los periodistas que estaba "tranquilo"; cuando salió, siete horas después, repitió la misma palabra. "Estoy bien, contento de haber declarado, tranquilo. He dado la información al fiscal. Contesté las preguntas que al fiscal le interesaban saber. Nada más", afirmó.

Ante la insistencia de los periodistas sobre cómo le había caído esta citación, Arce respondió: "Como siempre, tranquilo; me tocó declarar, nada más". Dijo también que no tenía "idea" de quién había matado a Rosana, que no era "quién para dar opiniones" sobre quién la había ultimado y que el fiscal ponía la lupa sobre él porque fue "el marido" de la víctima. El abogado Rúa explicó que "fue una jornada de muchas horas de declaración, con diversas cuestiones para resolver que seguramente van a requerir un nuevo llamado".

Según señaló, "acá se están analizando muchos años de relación, temas de violencia y la cuestión económica, que era una de las preocupaciones de la familia Galliano" tras la separación de la pareja. Durante el interrogatorio, contó, el fiscal consultó a Arce sobre "situaciones muy puntuales de su relación con la familia Galliano, y luego se pasó a distintas preguntas relacionadas con testigos que pasaron en la causa". Así, Pernici inquirió a Arce sobre personas que aparecieron en televisión diciendo que el viudo había estado ofreciendo dinero para que alguien se encargara de matar a su ex esposa.

La defensa advirtió que el fiscal apunta al llamado que recibió Rosana el día del crimen realizado por José Arce para avisar que el hijo de la pareja había sido llevado al hospital, pero aclaró que "no hubo ninguna coartada, sino que era un comentario de un padre preocupado por un hijo con fiebre". Y también relativizó la versión de la familia en torno a que Arce sabía que en la casa no había señal para atender el celular, con lo cual la víctima se veía obligada a salir al encuentro de su asesino.

"La situación es la de siempre. Antes estaba sospechado, ahora lo llamaron a indagatoria que es otra figura procesal. Pero estamos tranquilos, convencidos por la inocencia de Arce y de que podemos aclarar todas las cosas que pregunte el fiscal", señaló el letrado.

Fuente: DYN