Un joven de 31 años fue literalmente ejecutado de un tiro en la cabeza por dos delincuentes que irrumpieron en su casa de Monte Grande y que también golpearon a su padre, tras lo cual robaron lo que encontraron y escaparon.
En la huída, los criminales se tirotearon con un vigilador del barrio que intentó detenerlos, pero lograron llegar a un auto que habían estacionado a la vuelta de la casa.
El crimen ocurrió en la pasada medianoche en la casa de Ingeniero Doucloud 444 de Monte Grande cuando dos ladrones armados aprovecharon que Gastón Sansone, de 31 años, y su padre, Salvador Sansone, de 63, ex secretario de Deportes del partido de Esteban Echeverría, estaban en la puerta de la casa, reparándola.
Los ladrones les exigieron dinero y comenzaron a golpearlos, y el joven pidió a gritos que no le pegaran a su padre, porque había sufrido recientemente un accidente cerebrovascular, según contó el propio Salvador Salsone al canal TN. "Cuando entraron, porque seguramente pasaron y vieron la puerta entreabierta, pedían los '30 mil dólares' que creían teníamos guardado, pero como no había dinero, se pusieron muy nerviosos", relató el padre del muchacho asesinado.
Dijo que entonces su hijo empezó a pedir que no le pegaran a él, y "lo llevaron a la pieza y oí un disparo: cuando fui a ver, estaba mi hijo tirado en el suelo del pasillo, todo ensangrentado": lo habían ejecutado de un tiro en la cabeza, pero antes lo habían golpeado brutalmente. "Actuaron a cara descubierta", dijo el hombre, que tuvo que ser internado después del hecho para ser asistido del golpe en la cabeza, parte de la cual tenía hoy vendada.
Los asesinos robaron igualmente en el interior de la casa lo que pudieron encontrar de valor y al escapar fueron sorprendidos por custodios privados que les dispararon.Tras un breve tiroteo lograron subirse a un auto que habían estacionado a la vuelta de la casa donde cometieron el crimen.
El padre del joven asesinado fue internado en el Policlínico Santamarina de Monte Grande, donde fue asistido del culatazo de un arma que recibió en la cabeza. Esta mañana, el hombre, acompañado por su hija, dialogó con la prensa, y dijo que los individuos actuaron a cara descubierta y que parecían muy nerviosos.
Fuente: DyN