La causa donde se investiga la intervención de la Justicia misionera al teléfono de Sergio Burstein, familia de una víctima de la AMIA, sostiene su curso. Por orden del juez federal Norberto Oyarbide, a cargo de la investigación, se detuvo a Ciro Gerardo James, un ex miembro de la Policía Federal, retirado hace dos meses, que al parecer trabajaba como abogado para Jorge "Fino" Palacios en la nueva fuerza Metropolitana de Mauricio Macri.
James, un abogado que además trabajó como fotógrafo para los servicios de inteligencia, quedó detenido acusado de retirar los cassettes con las grabaciones de los teléfonos intervenidos por la Justicia misionera. "Está incomunicado. Figuraba como el único que podía retirarlos. Pudo haber estado bajo las ordenes del Jorge "Fino" Palacios porque ingresó y luego renunció a la Federal para integrar la Metropolitana", relató Burstein a Perfil.com.
El viernes pasado, este portal dio cuenta de la situación de Burstein, acusado de un homicidio cometido en Misiones - provincia que no visita desde hace veinte años - , por el cual la Justicia había intervenido su teléfono. El fiscal de la causa AMIA, Alberto Nisman, pidió conocer detalles sobre el tema habida cuenta de las conversaciones que mantenía con el familiar a través de ese teléfono.
"Si había algún motivo valedero para justificarlo o si era una excusa para escuchar a Burstein", explicó el fiscal a Perfil.com. "Si emana de la orden de un juez, entendemos que es legal. Pero se lo vincula a Burstein una causa y se sabe que no tiene nada que ver. Quienes lo hacen pareciera que están cometiendo varios delitos penales, que es lo que está tratando de determinar el Oyarbide", dijo Nisman y agregó: "Si se quisieron escuchar algunas conversaciones del caso AMIA es escandaloso, es una intromisión a la privacidad que es muy grave".