Ezequiel Ramón, acusado del crimen de su cuñado de 11 años, Gastón Bustamante, se declaró hoy inocente, pese a reconocer que tocó el televisor de la casa del niño, donde quedaron sus huellas, la prueba principal por la que fue detenido esta semana.
"Confirmó que estando detenido recordó haber tocado el televisor", dijo el fiscal de Mar del Plata Rodolfo Moure, tras la indagatoria que duró varias horas, pero no dio más detalles al respecto porque, según explicó, ahora debe determinar con testigos la veracidad de los dichos de Ramón.
"Se ha proclamado inocente", sostuvo Moure sobre los dichos de Ramón durante las tres horas de indagatoria en las que el acusado se explayó sobre los 27 puntos que el fiscal tenía preparados.
Ramón quedará detenido en la DDI de Necochea y el fiscal tiene ahora 15 días, prorrogables por otros 15, para resolver la situación procesal del acusado, según informó DyN.
"Nada quedó sin tratar", le dijo a DyN el abogado de Ramón, Alejandro Borawski. El fiscal relató que el acusado negó tener deudas de dinero pero que sabía que la familia de Gastón contaba con un plazo fijo porque él lo había ido a depositar.
Gastón fue asesinado el 21 de noviembre en su casa de la calle 27, entre 46 y 48, de Miramar, cuando ingresaron a robar a la vivienda y fue estrangulado con una media ya que, se sospecha, el homicida era conocido por el chico.
Ramón fue detenido esta semana cuando una estudio genético arrojó que sus huellas se encontraban en el televisor de la casa. "Tengo acreditado que la persona que llevó el televisor a la cocina es la misma que mató a Gastón", explicó el fiscal, que también adelantó que citará a declarar como testigos a más familiares de la víctima y del detenido.